Capítulo 9

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La alarma sonó intransigente por toda la habitación mientras él observaba con los ojos bien abiertos el inspirador amanecer. Se sentía extraño, ansioso por algo que no volvería a suceder. Apagó el chirriante sonido y apartó las sábanas yendo hacia el baño. La ventaja de la casa de su madre, actualmente su hogar, era precisamente que su conexión al baño era una maravilla. Decorado con mármol blanco y luces led del colores fríos, a Wonwoo le encantaba que incluso de esa manera tan particular podía hacer sus cosas visiblemente mejor. Mojó su rstro de agua fresca y cepilló sus dientes con suma lentitud. El verano estaba llegando a su fin, lo que significaba para él, idas a la playa y salidas a menudo.

Abrió las ventanas para mejor ventilación y, como buen hombre ordenado, recogió su habitación en un santiamen. Para aquel sábado no había absolutamente nada planfificado así que podía fácilmente descansar en la cama viendo una serie de su interés. Un toque suave en su puerta y dos segundos después la castaña cabeza de Mingyu asomó con una taza de café.

Hoy era el último día que los Kim estarían en casa. Su estadía se había alargado, en la mente de Wonwoo, porque su tía quería pasar más tiempo con su mejor amiga y que sus hijas salieran un poco de su barrio. La realidad era que Mingyu quería pasar tiempo con él y todos lo sabían aparentemente excepto el aludido.

- Creí que te levantabas más tarde – Mingyu parpadeó hacia él sorprendido extendiendo el café – ¿Puedo pasar?

- Oh, me trajiste café – Wonwoo sonrió tomándo el líquido caliente – Está delicioso, gracias.

Mingyu miró la habitación pulcramente ordenada y lo miró a él con una ceja arqueada.

- No sabías que eras tan ordenado.

- No todos podemos seguir siendo un desastre, Kim.

- Yo no soy un desastre, Jeon.

- Tu madre no dice lo mismo, Kim.

- Mi madre no vive conmigo desde hace años – bufó el menor sentandose en la silla de su escritorio – Mis hábitos han cambiado.

Wonwoo lo sabía. No era que su tía fuera muy callada y él se había enterado mayormente de los pasos de su ex novio por pura casualidad. Bebió su café gustoso y tomó asiento en la cama frente al moreno que se notaba más que nervioso. Él lo conocía bien. Tantos años juntos dejaba sus conocimientos adquiridos y, aunque pensó olvidarlo, el moreno para él era como un libro abierto lleno de paginas rayadas en letra cursiva en su fuente favorita.

- ¿Qué harás esta tarde? - preguntó Mingyu jugando con sus manos – Mis padres se van al mediodía pero mi vuelo es a medianoche.

- ¿No te quedarás en California? - el pelinegro se sorprendió por ello - ¿Por qué?

- Mi vida está en New York, Wonwoo. Mi trabajo, mi mascota, mis nuevos proyectos... NO me queda nada real en California. - contestó con sinceridad – Vine esta vez porque Seulgi noona dijo que me mataría si no venía a su cumpleaños esta vez y me llené de vergüenza y programé el vuelo con tres meses de antelación. Encontrarte aquí me hizo el año entero pero, ya tengo que volver a mi rutina.

Dolía pero era la verdad. Mientras que Wonwoo programó su vida en Francia para una estadía necesaria, el moreno rehizo la suya en una ciudad completamente diferente. No era algo completamente descabellado si lo pensaba correctamente pero una parte suya reconocía la valentía del moreno mas deseaba pasar tiempo con la única persona que en algún momento le recordó lo que era estar vivo.

- Supongo que te veré en algún momento del año – chasqueó la lengua – Respondiendo a tu pregunta aterior, planeaba quedarme en casa viendo series o escuchando música.

- ¿Me puedo unir a tí? - cuestionó Mingyu curioso por si Wonwoo habría retomado sus gustos – Prometo comprar pizza.

- ¿No prefieres salir?

- Por íncreible que te pueda parecer, no me gusta tanto salir a no ser que sea estrictamente necesario.

- Elige la comida y yo la serie...

- Mientras no sea una cortavenas... Sé que te gusta lo sensible pero no hay que exagerar.

- ¡Yah!

Dos pizzas, coca cola y café después, Mingyu y Wonwoo disfrutaron su tarde como antes. El tiempo conspiró a su favor por lo que disfrutaron de la compañía del otro. Criticaron. Rieron y lloraron durante los 16 capítulos más emocionantes y Mingyu elogió al pelinegro por su elección. Ni siquiera notaron cuando la hora de irse de Mingyu llegó. Mientras el moreno se duchaba y empacaba su maleta, Wonwoo le pidió a su madre el auto para llevar al moreno al aeropuerto. Llevaba años sin conducir por su cuenta pero, las habilidades no se pierden tan rápido.

Eligió uno de sus chandal favoritos y condujo al moreno al aeropuerto. La música iba alta como solo ellos podían gritarla a todo pulmón mientras el GPS indicaba el camino.

- Deberías ir a New York algún día – invitó el moreno – Te aseguro que te va a encantar.

- Lo pensaré

Una hora más tarde luego de que Mingyu pasara por el control y el check in previo al vuelo, tomaron asiento en una de las cafeterías dentro. Charlaron por un rato y compartieron números de telefono y correos electrónicos. El moreno se despidió con una sonrisa brillante agradeciendo el tiempo que pasaron juntos y repitió la invitación para que le visitara en su hogar. Mingyu caminó hacia la fila de abordaje y Wonwoo se quedó ahí de pie mirándole caminar hacia su destino. Tragó saliva ante la sensación que no le gustó y le gritó. El aludido se giró confundido y salió a ver que sucedía.

Era imprudente y eĺ lo sabía pero, Wonwoo prefería golpearse. Caminó con renovada confianza hacia un moreno confundido y se inclinó capturando los labios contrarios en un corto beso que le supo a poco. Mingyu exhaló y le dió esa mirada tan encantafora que él conocía muy bien. Le había besado por voluntad propia justo cuando tenía que irse. El moreno bajó sus labios hacia él devolviendo la misma intensidad y retomó su camino hacia el avión.

Wonwoo sonrió con los ojos cerrados e hizo su propia salida hacia el auto. Lo sintió así y lo hizo. No sintió una gota de arrepentimiento, no sabia si el moreno se sentía igual hacia el aunque lo besó de la misma manera. Quizás cuando llegase a casa cambiaría de parecer pero ahora mismo solo se concentraría en saborear los labios de Mingyu remanente en los suyos.





Cortito pero bonito. Se cierra el primer ciclo y empieza el segundo. Espero les guste :)

Summertime (Meanie) [Terminada]Where stories live. Discover now