NINE

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Otro dia de arduo trabajo había acabado aunque no la tortuosa parte en la que pensaba todo el día en el lindo omega, tenia un cuerpo tan lindo, esas piernas largas de muslos gruesos fueron lo que los causantes de que no lo pudiera sacar de su cabeza, Namjoon era su omega destinado pero había sido muy cruel con él pero aun siendo consiente de haberlo tratado mal no quería retractarse de lo dicho a pesar de que el lobo en su interior arañaba por ir con él, disculparse y hacerlo suyo dejando su marca para que todos lo vieran.

Tenía pensamientos tan arcaicos sobre el muchacho, quería dejarlo preñado, que luzca un vientre hinchado que fuera prueba de que él Omega era suyo.

Su lobo le pedía formar una familia con él pero no podía, eso sería traicionarlo, ensuciar su memoria cuando Seokjin había sido más que perfecto y era irremplazable. No nunca habría nadie como él. No podía, toda su vida había soñado con casarse con él, incluso cuando era tan pequeño y no sabía lo que eso significaba.

Sería un mal alfa si escogiera estar con el oficial Kim Namjoon.

Era imposible.

Manejo hasta su casa pensando en aquel momento tan íntimo que el Omega había tenido con su hijo, su pequeño que se había vuelto tan distante con todos, estaba pidiendo estar en los brazos del omega, el pequeño había pedido que se quede y le había gustado su aroma. También pensó en lo cruel que fue sacándolo de su casa y aquello lo llevo a pensar en lo que luego había hecho con su Yoongi. Lastimó a su hijo tan profundamente, que ahora el pequeño no lo quería cerca y estaba aún más distante que antes.

La había cagado en grande "en memoria de Seokjin", sabia que el Omega se hubiese enojado mucho. Siempre había dejado en claro que mataría a cualquiera que intentará lastimar a sus hijos y él lo había hecho. Estaba arrepentido por lastimar a su cachorro y ahora no sabia como recuperar su confianza.

Paso por un restaurante para comprar algo de comida recordando que su madre y hermana habían llegado a su casa y por lo mismo no había ido Felix a cuidar a sus hijos, su madre los había recogido del kinder y ya estaba con ellos, en agradecimiento con su familia quería llevar algo delicioso para comer, ya se lo había dicho a su madre con anticipación para que no cocine.

Hizo su pedido y pago y espero sentado un momento mientras veía su teléfono, tenía tantas fotos con él, no había notado cuánto le hacía falta, su corazón dolía por él, siempre lo haría, sobre todo al ver a sus cachorros, ellos se parecían tanto a él y estaban creciendo sin un padre Omega que les diera ese amor que él no sabía cómo dar, se sentía tan inútil sin su Seokjin. Cuando su orden estuvo lista salió de restaurante y metió las bolsas con la comida en el asiento de copiloto. Entró nuevamente al auto, debía ser sincero, no tenía ganas de regresar a casa, no quería ver a su madre y hermana, siempre lo criticaban y no tenía ánimos para aquello.

Pero debía apresurarse para que sus hijos comiera. Cuando al fin llegó a su casa, se estacionó, salió del auto y tomo sus cosas y las bolsas con la comida, puso el seguro y la alarma y fue a su departamento. Al abrir la puerta como siempre su pequeño Taehyung salió corriendo para recibir sus abrazos y él lo recibió gustoso en sus brazos. Vio que su madre lo miraba con enojo mientras Yoongi estaba con Nayeon coloreando unos gatitos, no lo miro aunque era obvio que lo había escuchado llegar.

—Hola mamá— saludo primero y luego continuo con su hermana —Hola Nayeon.

Nayeon no se puso de pie mas respondió.

—Hola, idiota.

—Nayeon, controla lo que sale de tu boca— dijo su madre y luego lo vio a él —Tenemos que hablar Jungkook, en privado— dijo poniéndose de pie mientras el dejaba a su hijo en el suelo y el pequeño iba hacia su tía Nayeon y su hermano mayor.

JUSTICE'S PATH • [KOOKJIN / KOOKNAM]Where stories live. Discover now