Desconocido [MiTake]

EPÍLOGO

|Como si nada|

24 Horas después de que Sano Emma despertara.

En algún barrio de Shibuya.

Hora 16: 43 pm...

Un bostezo largo escapó de sus labios al mismo tiempo que estiraba ambos de su brazos y los colocaba a lo largo de aquel sofá negro de cuero.

Sus ojos ámbar, miraron con algo aburrimiento el cielo anaranjado y rosa que se podía observar tras aquellas gigantescas ventanas.

Pinturas, una más cara que la otra, yacían colgando de las paredes color crema. Y en la parte inferior de aquella habitación, un gigantesco librero acumulaba polvo.

Un piso alfombrado y un pequeño bar en una de las esquinas.

—¿Que dicen de ir a por pizza de piña después de esto? — sugirió jugando con aquella lata de cerveza en sus manos.

—La junta ni siquiera ha empezado y ya hablas de comer, vaya mierda — el peli negro de ojos rasgados sentado en el sofá a su delante ni apartó la mirada de aquellos documentos para decir esto.

—Hey...— levantó uno de sus manos dejando ver aquel tatuaje en ella, movió su dedo índice de lado a lado para negar ofendido —No hables sino sabes nada... Koko-kun.

Hajime Kokonoi lo miró por un instante con una mueca de desagrado.

Sin importarles esto, él simplemente continuó: —Ser fugitivo no es nada lindo ¿Sabes?. Hay muchas cosas que se nos son restringidas.

Se quejó muy atormentado por esto, más eso no le impidió sonreír y mirar de soslayo al menor sentado a su lado.

—Verdad, Kisa-chan~

—No me metas en esto Shuji — Tetta Kisaki empujando su rostro lejos de su presencia chasqueo la lengua molesto, sin dejar de ver la computadora portátil sobre la pequeña mesa a su delante —Mejor dejemos de hablar de idioteces y centrémonos en lo que en verdad importa aquí.

Sentenció aplastando la tecla de Enter antes de levantar la mirada y centrarse en aquel par de ojos amatistas.

—¿Cómo van las cosas en Shinguko?... Rindou-kun.

Rin desde aquel reposabrazos, levantó sus hombros y negó: —Nada bien. Brahman es un hueso duro de roer.

—Querrás decir que la perra de Senju lo es — el rubio de tatuaje en la sien lanzó sin más un dardo a aquel tablero en una de las paredes —Ya que Akashi Takeomi, su hermano está más que listo para negociar.

Reveló Shion Madare un tanto estresado por la situación.

—Ella no es fácil de manipular como Terano — añadió en cambio cierto rubio de ojos verdes y quemadura en la cara, de pie tras Kokonoi — Debemos ser pacientes, la trampa ya está puesta, es solo cuestión de tiempo para que la rata albina caiga.

—¿Y por qué no mejor matarla? — opinó Shuji Hanma aburrido ocasionando un largo y tenso silencio.

Pestañeo un par de veces desentiendo: —¿Que?

—Sigues hablando estupideces. Tu bien sabes que esas no son las órdenes esta vez — Kisaki volvió a su computador tras hacerle notar a su compañero lo mal que estaba.

Más, Hanma levantó los hombros y miró a todos con algo de burla y complicidad.

—Vamos, hablan como si nadie aquí no lo hubiera pensado antes.