Capítulo 6.

952 130 5
                                    

La cita había terminado, las chicas regresaban a la casa de la castaña y el ambiente estaba un poco tenso

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

La cita había terminado, las chicas regresaban a la casa de la castaña y el ambiente estaba un poco tenso. Llegaron a la puerta y Nayeon giró a despedirse, ambas se sonrieron por un momento, antes de retirarse con miradas nerviosas.

──Espera ── llamó Jeongyeon. Nayeon se detuvo en cerrar la puerta, la rubia se acercó y tomando su mano con delicadeza, dejó un sobre de color rosa.

── ¿Y esto? ── preguntó la castaña, estaba a punto de abrirlo ── ¿Qué es?

── No lo abras aún ──la detuvo, juntando sus manos sobre las de ella ── espera a que me vaya ¿Si?.

Nayeon, aún nerviosa por su cercania, asintió sonrojada. Jeongyeon volvió a despedirse y la castaña la vió alejarse, por fin pudo soltar su emoción cuando la notó lo suficientemente alejada y gritó de felicidad, corriendo a su cuarto.

Jeongyeon seguía su camino cuando una conocida compañera de escuela se detuvo frente a ella, era Jennie.

── ¿Si?── preguntó extrañada, la rubia tenía cara de pocos amigos. Observó la bandeja que tenía, estaba cubierto por una manta blanca y un aroma familiar invadió su espacio.

──¿Me compras unos tamales?── preguntó seriamente.

La carcajada de Lisa, quien estaba escondida tras los arbustos llegó a ellas.

──¡Deja de reirte! ¿Quieres? ── regañó sin mirarla ── ¿Me vas a comprar o no? ──volvió a dirigirse a Jeongyeon.

──Ah, no, lo siento ── respondió incómoda ──no traigo nada conmigo.── Jennie suspiró y sin responderle, la hizo a un lado y siguió su camino.

Detrás de ella Lisa la perseguía a una distancia prudente mientras no dejaba de grabar.

──Deja de grabarme ── pronunció Jennie entre dientes.

──No ──enfocó su rostro por completo ── mira lo que haces por mí, que linda ── rió.

──Qui lindi ── viró los ojos ── ¡Tamales! ── siguió con la venta.

Nayeon ya se encontraba en su habitación

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Nayeon ya se encontraba en su habitación. Emocionada por ver qué decía aquella carta, se tiró a la cama y sin perder tiempo, la abrió, encontrado una hoja con unas cuantas palabras: "Rompí una de las reglas del contrato, por lo tanto, aquí tienes tu dinero. Espero reparar esta cita con otra" La castaña, dudosa, abrió el sobre por completo, dentro estaba la cantidad exacta que había pagado en la subasta de citas.

──Q-que...Qué significa? ── se preguntó.

──¡Nay- Nayeon! Cómprame un tamal! ── se escuchó fuera de su casa ── ¡O mejor dos!.

La castaña dejó el sobre en su cama y corrió a la entrada de su casa. Al abrir, Jennie ingresó sin permiso y antes de que Lisa alcanzara a entrar, le cerró la puerta en la cara.

──¡Oye! ──Lisa comenzó a tocar la puerta.──¡Jennie!

──¡Ahora salgo!── avisó la pelinegra. Giró a ver a su amiga, ella la miraba extrañada. ── sí, ya lo sé, tienes varias preguntas, pero solo vamos a lo más importante ¿Me compras un tamal?. ── quitó la mantita que los cubría ── hay de pollo y de cerdo ¿Cuál quieres?.

──¿Haces esto por lo de la subasta? ──preguntó Nayeon.

──¿Y crees que no? Lisa ya me amenazó Con ponerme una demanda ──comentó exasperante ── llevo todo el día caminando y solo me compraron cinco tamales. Deja de preguntar y mejor ayúdame a progresar mi negocio.

──Ya, está bien, se nota que andas estresada ── se dirigió a las escaleras ── ¿ A Cuánto están?.

── Diez dólares cada uno ── respondió.

──¿Qué?── giró a verla ── Con razón no vendes, ¿Y quién demonios te compró un tamal a diez dólares?.

── Me los compró mi abuela y mis tias ¿Sí? Tengo más de mil dólares que pagar, sé un poco más comprensiva ── se indignó.
Nayeon viró los ojos.

── Está bien, espérame aquí ── subió a su habitación.

──¡Jennie! ── Lisa volvía a golpear.

── ¡Espérame, mujer! ¡Ando vendiendo para nuestra cita! ── miró su reloj ── que por cierto, es en unas horas ── se acercó a la puerta y se inclinó para hablarle ── ¿Emocionada?.

──Ya quisieras ──respondió Lisa ── solo lo hago para fastidiarte.

──Lo que digas, cariño ── sonrió ── haz estado todo el día conmigo. Te gusto y se nota.

──¿Por qué eres tan imbécil?

── Cómo rompes el romance ── negó ── Así sería nuestra relación si formalizamos?

── No lo sé, no lo sabremos porque alguien no quiere una relación seria ── respondió Lisa con los brazos cruzados.

── Lisa...── Jennie detuvo su hablar, Nayeon bajaba de las escaleras.

── Ya está ──llegó frente a ella y pegó un sobre en su pecho, Jennie lo tomó con dificultad al tener la bandeja.

── ¿Qué es esto? ──intentó ver en su interior.

──Es dinero, no es todo lo que debes pero si es un porcentaje ── Jennie levantó la mirada a ella, sus ojos brillaban temblorosos.

──¿Te puedo besar? ── preguntó conmovida.

── ¡Claro que no! ── intervino la voz de Lisa desde fuera. Esta vez fué Jennie quién viró los ojos.

── Está celosa ──aclaró la pelinegra ── gracias, algún día te devolveré el favor ── abrazó Como pudo a su amiga ── ten, toma todos los tamales ── Nayeon los tomó torpemente ── disfrútalo, tengo que alistarme para mi cita ── abrió la puerta, saliendo de inmediato ── adiós.

Lisa giró a ver a Nayeon y la miró de pies a cabeza, para luego ignorarla y seguir a Jennie. Sí, estaba celosa por lo que dijo la pelinegra.

 Sí, estaba celosa por lo que dijo la pelinegra

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Subasta De Citas | 2yeonWhere stories live. Discover now