، 🌱 : Capítulo 05.

6.3K 906 70
                                    

El ambiente hogareño es lo que más amaba Jungkook. Desde pequeño recuerda ese sentimiento, cuando en las mañanas despertaba por el delicioso aroma del pan que su madre acaba de sacar del horno, no recordaba cuando fue la última vez que se sintió así.

Hasta hoy.

Había despertado con el olor a vainilla rozando su nariz.

Bajó con cuidado y ahí estaba aquel omega.

Jimin sacaba el pan del horno, llevaba el delantal que compró hace meses y que solo había usado un par de veces, mientras Bohyun colocaba los platos sobre la mesa.

—Buenos días, Jungkook —dejó el pan sobre la mesa limpiando los restos de aceite sobre sus manos con un pañuelo.

—Buenos días, Jimin —se acercó a Bohyun dejando un beso sobre su pequeña cabeza—. Buenos días a ti pequeño Bo.

—Buenos días a ti papi —el cachorro dejó que su padre besara su cabeza y continuó comiendo su trozo de pan.

—¿Irás a trabajar hoy? —pregunta el omega sirviendo el café dentro de las tazas.

—Si, aunque hoy saldré temprano, no tendrás que aguantar a Bohyun tanto tiempo —el pequeño extiende la cuchara para que su padre pueda añadir azúcar a su café.

—No me molesta cuidar de él, nos divertimos bastante, ¿no es así Bo? —coloca uno de sus rizos tras su oreja de forma cariñosa, Bohyun asiente con la cabeza prestando atención únicamente a su pan.

—Bien, debo hacer las compras el día de hoy así que, pensé que talvez te gustaría acompañarnos —el alfa observa a Jimin, quien está tratando de formular una respuesta.

—De acuerdo, no hay problema con eso —y era verdad, No había problema con eso, al menos no para Jungkook pero Jimin, el omega no tenía más que un poco de dinero para comprar un par de cosas.

—Bien, nos vemos a las tres, vendré por ustedes, debo irme, es tarde —se levanta rápidamente sacudiendo, sus pantalones—. Estuvo delicioso.

No importaba cuanto lo intentara, Jungkook siempre llegaba tarde a todos lados, por más que despertara una o dos horas antes siempre llegaba tarde.

Y hoy no era la excepción, llegó tarde a la primera cita del día, un pequeño, el cual lloró cuando Jungkook tuvo que hacer la limpieza.

Jimin había estado ocupado toda la tarde, parecía que la casa del alfa no había sido limpiada en años, había polvo por todos lados, ropa sucia en cualquier lado.

—Me parece que el Jardín necesita una mano, ¿no lo crees Bohyun? —el menor daba vueltas por todo el jardín jugando con un coche sobre los pequeños bultos de tierra.

—Papá no es bueno con las plantas, a mi me gustan pero siempre olvida ponerles agua.

—Bien, Yo podría enseñarle a cuidarlas —la vista de Bohyun se alza observando a Jimin con adoración.

El corazón del omega da otro vuelco cuando el cachorro mira directamente sus ojos.

Ambos continúan limpiando el jardín, quitando las hiervas secas y regando el poco pasto que había.

Terminan con la limpieza, Bohyun toma un baño al igual que Jimin, ahora los dos están recostados sobre la cama del pequeño viendo los dibujos que están pegados en la pared.

✧✦✧

Jungkook estaciona el auto frente a su casa, cruza la puerta y lo primero que siente es el aroma.

Fresas y vainilla.

Volando por el aire, su pecho se oprime, y desea tanto embriagarse de aquel aroma.

—Estoy en casa —dice en cuanto comienza a subir las escaleras.

Choca con un cuerpo, un poco más pequeño que él, lo toma de los brazos para evitar que caiga, es Jimin que ha salido corriendo de la habitación de Bohyun con él corriendo detrás.

—Ya íbamos a bajar —dice el omega tímidamente con el color carmesí pintando sus mejillas.

—Si eso veo, evita correr, puedes lastimarte —toma uno de sus cabellos y lo coloca detrás de su oreja, Jimin se estremece, y se aleja.

—Si, lo siento.

—Bien, vamos —Bohyun es el primero en bajar las escaleras y Jungkook el último.

El cachorro abre la puerta trasera y entra, Jungkook abre la puerta para que Jimin pueda ingresar.

Llegan al centro comercial con Bohyun aferrándose a la mano de Jimin, detrás de ellos.

El alfa empujaba el carrito, mientras Jimin leía la lista que habían hecho en el auto, diciendo lo que necesitaban.

Estaban en el pasillo de los detergentes,  tomó un suavizante para la ropa y un jabón en pasta, estaba a punto de tomar la botella para aromatizar la casa cuando el alfa lo detiene.

—No necesitamos ese —dice fríamente.

—Pero está en la lista.

—No me gusta ese aroma.

—Bien, aquí hay otros, lavanda, manzana canela, floral.

—Ninguno, así estamos bien.

Jungkook no quería otro aroma desde que descubrió la fresa y vainilla que desprendía el omega.

Al salir no fueron directamente a casa. Habían ido a un pequeño mercado, donde vendían artesanías y comida.

—Mira Jimin, plantas —dice Bohyun mientras jala con desesperación el suéter del omega.

—¿Plantas? —pregunta Jungkook.

—Si bueno, hoy estaba tratando de arreglar tu jardín, Bohyun dice que las plantas no son lo tuyo.

—Jimin enseña a papi —Bohyun tira de la camisa de Jungkook para obtener un poco de su atención.

—¿Así que me enseñarás a cuidar plantas? No creo estar de acuerdo con eso, de igual manera, toma las que quieras.

—Jungkook no, yo no... —hace una pausa—. Yo no puedo comprarlas.

—Pero, nadie dijo que tú las comprarías, dije que tomaras las que quieras.

✧✦✧

Vuelven a casa con un desastre de plantas en la parte trasera del coche, no es que Jimin haya pedido todas porque no fue así.

Con solo mencionar que era linda, bastaba para que Jungkook la tomara y la pusiera junto con las otras. 

Entraron a casa, Jimin cargando algunas bolsas, Bohyun ayudando con las plantas más pequeñas

Jungkook colocó todas las plantas en el jardín y Jimin comenzó a preparar la cena.

Ambos cenaron, cruzando las miradas, mientras Bohyun contaba algo a lo cual ninguno de los dos estaba prestando atención.

Jungkook no podía negar lo que sentía, no importaba que acabara de conocer a Jimin.

No se sentía así.

Se sentía diferente

Como si sus almas ya hubieran estado juntas, como si fuera un reencuentro, de alguna u otra manera, como si estuvieran destinados a enamorarse.

like the summer breeze › kookminWhere stories live. Discover now