_7_

134 16 7
                                    

_______☆☆☆_______

Debra



A pesar de haber pasado tantos días, no era capaz de quitar de mi mente aquella noche y en la estúpida idea de volver a traerlo.

Sí, ahora tenía la seguridad de que el hombre que apareció en mi casa la primera vez, y también la segunda, no era otro más que Hades Rydenhat. El personaje público más deseado por los medios de comunicación y por los ciudadanos de a pie.

Definitivamente era una locura. ¿Por qué él? ¿Por qué fue él quien apareció frente a mí tras aquel estúpido ritual de aquella bruja? Seguía sin querer creerlo… aunque no había ninguna duda.

Esos ojos del color de la miel eran inconfundibles, y era algo que corroboraba al ver cada anuncio desplegado por toda la ciudad. Estúpido Rydenhat…

—¿Debra?

Regresé a la realidad buscando la voz que me llamaba.

—¿Sí?

Sus ojos marrones me miraban con un toque de confusión. Su ceño fruncido, como si me estuviese analizando.

—No me estás oyendo. —Dijo de repente.

No podía negarlo del todo, no estaba completamente atenta a lo que Mandy me decía. Habíamos decidido salir a comprar un par de cosas que necesitaba ella para un proyecto. Rachel se quedó en casa preparando todo para cuando Mandy regresara y ponerse de inmediato con lo que le pidieron en clase. En cambio Missy tenía un almuerzo importante con su padre y algunos miembros de su gabinete.

—Lo siento, Mandy.

—¿En qué piensas? —Insistió. —Llevas un tiempo como… ida.

Era indudable que se habían dado cuenta de ese pequeño cambio en mí. Pero como para no estar algo extraña.

—Que va. —Intenté desviar el tema. —Estoy igual que siempre. Es sólo que las clases son un poco más pesadas este año.

Volvió a quedarse mirándome, analizando de nuevo si se trataba de una mentira mis palabras, aunque por el suspiro y el asentimiento que me dedicó, diría que había colado en parte aquella pequeña trola.

—¿Muy difícil las asignaturas?

Y asentí, aunque no fuese nada de eso.

—Mackenzie está más exigente este curso. —Mentira.

—¿Y Chase?

Rodé los ojos en cuanto mencionó el nombre de ese idiota.

—Sigue en su idea de no desistir en su “conquista” para llevarme a la cama. —Respondí sobando un poco mi frente. —Aunque este año parece que va con todo.

—¿Qué quieres decir con eso?

—Está más decidido que nunca a conseguir algo conmigo.

Ambas echamos a reír por esas palabras.

—Dudo mucho que lo logre.

—Haces bien en dudar.

Y volvimos a reír continuando nuestro camino.

...

Después de que Mandy me dejase en casa y regresara con Rachel para realizar su proyecto, preparé un baño relajante con sales y una copa de vino. Sí, necesitaba despejar mi mente un poco de todo lo que andaba en ella sin motivos.

Dejé la ropa preparada sobre la cama y luego entré en el baño. Me deshice de la muda que llevaba puesta y me metí en el interior de la tina, sintiendo el calor del agua recorriendo poco a poco mi cuerpo por completo hasta quedar tumbada.

Ritual. © // (En revisión)Where stories live. Discover now