6. KASEY REED Y HARVEY PETERSON

58 38 1
                                    

—¿En qué estás pensando, Zarek? ¿Encerrar a Aleksy? ¿Te has vuelto majareta? En lo que puedo pensar ahora es en que todo esto —hace un gesto con la mano —te ha quedado enorme

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿En qué estás pensando, Zarek? ¿Encerrar a Aleksy? ¿Te has vuelto majareta? En lo que puedo pensar ahora es en que todo esto —hace un gesto con la mano —te ha quedado enorme.

No agacho la cabeza en ningún mísero momento, porque, aunque amo con todo mi corazón a mi hermana, no hay estado para mí en muchos momentos de mi vida. ¡No están ni para mi cumpleaños! Eso no es de ser una familia, he tenido que aprender solo y por las malas, porque no he tenido una educación como tal en mi casa, solo la que he sabido aplicar yo en mí mismo.

Asimismo, yo no elegí venir a este palacio, literalmente, amanecí aquí sin ninguna explicación aparente. Todos —incluido yo —dejamos para otro momento esa conversación. Pero esto no quiere decir que en mi mente no esté pensando que hago aquí. Por otra parte, desde que amanecí en este palacio, están ocurriendo cosas verdaderamente sospechosas a mí alrededor, y eso tampoco lo puedo dejar pasar, y por eso mismo voy a investigar.

—¿En qué estaba pensando yo? ¿Acaso no pensáis vosotros? Haceros las preguntas a vosotros mismos, a mí no me vengáis con eso —niego con mi dedo índice en alto —ni se os ocurra hacer eso.

Intenta a hablar; sin embargo, yo le interrumpo dejándola callada.

—Ahora no Alenka, te quiero mucho, eres mi hermana; te he pasado que no estuvieras junto a mí, vivís no se en donde, no me puedo comunicar co vosotros, y vosotros solamente me contactáis una vez al mes. ¡Una jodida vez! Y no es por horas, son máximo cinco minutos.

Todo perfecto con mi familia, me dejaron viviendo solo en la ciudad en la que creo que es Detroit, porque ahora ya no estoy tan confiado de que haya vivido allí, en vez de en una realidad alternativa; por así decirlo.

Mi familia —madre, padre y hermana —son, en este momento un par de desconocidos o conocidos lejanos que no veo hace mucho tiempo. Eso no es una relación de una familia que se quiere, es todo lo contrario a eso. Yo estoy acostumbrado ya a su ausencia, a la ausencia de ellos tres. Me acostumbré a vivir solo en el piso de Detroit y ahora se va a volver a tornar todo en mi contra, puesto que voy a vivir con más personas aquí, que piensan que pueden ser superiores a cualquier persona, y nadie es más que otra, en ninguna parte del mundo.

A parte, ¿desde cuándo las personas que trabajan para ti mandan por encima de ti? Todo lo que ocurre en el palacio está a la inversa; pareciera que vivimos en el mundo al revés en este mundo paralelo —para mí —en el que nos encontramos ahora.

—Zarek...—empieza. No necesito sus disculpas baratas en este momento.

—Silencio Alenka —cierro la tapa del portátil de manera brusca. Estaba perdiendo la paciencia, y eso no llevaba a nada bueno —, no necesito otra persona que venga a decirme que estoy haciendo las cosas mal, que debo dejar a Aleksy fuera de esa celda —me levanto bruscamente y señalo con mi dedo a la puerta. ¡El cabreo está presente en mi sistema!

El mundo de ZarekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora