En Busca De Tus Latidos

Capítulo 1

╰┈➤ ❝ [Volviendo A Casa] ❞

Quinto año.

¿Quién diría que Hogwarts ya no es un lugar seguro?

Cualquiera que habitara el castillo un mínimo de diez días podía notar que dentro de esas paredes las locuras se disparaban.

Tenemos suerte si logramos salir ilesos de este infierno.

Detrás de cada suceso desastroso se encuentra un grupo de profesores desinteresados por controlar la situación.

Este año las cosas habían cambiado.

Mi padre había sido uno de los primeros en ser informados acerca del cambio de protocolo, la nueva profesora de DCAO y la presencia del Ministerio pisando los talones de Dumbledore.

Es por eso que, como parecía ser costumbre, viajamos antes de tiempo para que él pudiera ponerse al corriente de todas las reformas y precauciones que se deben tomar.

Podría decir que tengo suerte de ser hija de Severus Snape ya que gracias a eso puedo tener acceso a toda la información acerca de lo que sucede, además puedo vivir con las instrucciones necesarias para lograr sobrevivir a otro año escolar.

Pero este año hay algo diferente y no se trata solamente de la nueva dirección.

Desde que falleció Cedric Diggory y Harry Potter sentenció que Voldemort esta vivo, como consecuencia las cosas han cambiado en todos lados.

Durante todo el verano papá se encargó de darme un curso intensivo sobre DCAO, no estaba contento con tener que hacerlo pero decía que era para mí protección, no siempre iba a poder cuidarme él y debía comenzar a hacerlo yo misma.

Apenas quince años y ya corro riesgo mortal.

Siempre me gusto creer que mi padre es sobreprotector por que soy su única hija.

Ese pensamiento logra quitarme las pesadillas de noche, eso y saber que este en donde este siempre tendré a dos personas completamente pendientes de mí.

Mi padre y Mattheo.

Recorrer los pasillos en completa soledad puede volverse macabro después de estar día tras día esperando a que las clases inicien, a pesar de no haber disfrutado de lo que es llegar cada año en el mismo tren puedo asegurar que uno se encariña de las columnas fijas o los cuadros movedizos.

Así fue como, en una de las muchas caminatas que di, conocí mi segundo lugar favorito en todo el castillo, la sala de menesteres.

Un salón que aparece cuando alguien tiene una necesidad, se supone que dentro de ella está todo lo que uno puede requerir para saciar su desesperación.

Pude descubrirla el primer año que mi padre me obligo a viajar con él y siempre la visito antes de que las clases inicien, casi nunca la utilizo durante las clases por miedo a que otras personas pudieran verla.