Capítulo cinco

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Al escuchar aquellas palabras, Chanyeol dejó caer sus manos hacia abajo, soltando el rostro del menor y se alejó un poco.

Que le hayan informado sobre la amnesia era una cosa, pero que el mismo Baekhyun le preguntara quién era, era completamente algo diferente.

El pequeño hombre lo miraba sin una pizca de reconocimiento y peor aún, no tenía ese brillo que solía tener cuando se reunían a pasar la tarde en su apartamento.

Le dolía. Su corazón le dolía.

Pasándose las manos por la cara para limpiarse las lágrimas que comenzaban a salir de sus ojos, le dio como pudo una sonrisa.

— Soy Chanyeol. — habló con voz ronca.

Baekhyun abrió la boca para decir algo, no obstante la volvió a cerrar, sin saber qué decir. Chanyeol volvió a acercarse y levantó su mano para acomodar un mechón rebelde que caía sobre la frente del menor.

— Soy tú... ¿marido?

Baekhyun levantó las cejas sorprendido.

— Oh. No suenas muy seguro de eso.

Chanyeol soltó un suspiro y prefirió cambiar de tema.

— El doctor dijo que podríamos hablarte sobre tu pasado, ya que capaz eso te ayudaría en algo. ¿Quieres que te cuente sobre ti?

Baekhyun asintió lentamente. Chanyeol se sentó en la camilla y tomó las manos de Baekhyun.

Ambos ignorando como la oficial salía de allí para dejarlos solos.

— Eres Byun Baekhyun. — comenzó Chanyeol. — Tienes veintidós años. Y el hombre que no pudo entrar y salió corriendo, es tu hermano mayor, Hyunwoo. No se siente preparado para verte todavía. Siente algo de culpa por todo lo que te pasó. — Baekhyun miró a sus manos y Chanyeol le dio un apretón. Y siguió hablando. — Tus padres... Ellos son los que te hicieron esto.

Baekhyun levantó la cabeza y miró confundido al más alto.

— ¿Por qué harían eso?

— Has sido maltratado parte de tu vida por ellos, Baekhyun. — El alto vio como los ojos del menor se ponían acuosos. — Todo lo que te pasó fue por su culpa. Sé que es doloroso escuchar esto, pero tienes que saberlo. Tus padres te alejaron de nosotros y te hicieron esto.

— ¿Dónde están? — preguntó en un susurró.

— Uh, bueno, ellos murieron.

Baekhyun jadeo al escuchar eso.

— ¿Co-cómo? ¿Por qué?

— Los mataron en un ajuste de cuentas. — dijo sin vacilar. — Sin embargo, los conociste. Eran los señores Lee.

Chanyeol había sido informado sobre eso y le dio tanta impotencia que le hubiese gustado revivir a esos hijos de puta y volver a matarlos.

Baekhyun se quedó en silencio procesando la información.

— Oh. Que triste, supongo. — finalmente dijo el menor. — Habían sido amables conmigo en este último tiempo.

Chanyeol se mordió el labio, tenía que contarle sobre Hyemi también.

— Hay otra cosa que debes saber...

— ¿Uhm? — Baekhyun inclinó su cabeza.

Chanyeol llevó una de sus manos y acarició la mejilla de Baekhyun.

— Tú y yo...

Baekhyun se estaba poniendo nervioso. ¿Ellos dos qué?

— Nosotros... Uh, tenemos una hija.

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