La chica que amaste ❁ HyunIn

♡ : CAPÍTULO VIII

—Llegué

Hyunjin aventó el portafolio en la mesa de centro ubicada en nuestra sala y se dejó caer en el sofá, yo estaba muy enojado con la frente fruncida y los brazos cruzados, porque sin importar que, jamás faltaba a cenar, pero era la tercera vez de esta semana.

—¿Por qué has tardado tanto? —pregunté molesto—, la cena se enfrió, estuve esperándote por horas y ni siquiera me avisaste que llegarías tarde.

—No, Jeongin no, te lo ruego por lo que más quieras, esta vez no —dijo Hyunjin con un tono de voz lastimero y cansado—. Te lo suplicó por favor, no empieces, estoy muy cansado y no quiero pelear contigo.

—Pero es que...

—No —me interrumpió de nuevo—, de verdad, no ahora, voy a dormir.

—Y yo me quedo aquí como si nada, ¿Eso es lo que quieres? —dije frustrado—, viendo como cada vez te alejas más y más de mí, es por ella, ¿No es así?

—No metas a YuQi en esto —habló, aún serio y cansado, como si estuviera enojado—, no tiene nada que ver.

—Claro que tiene que ver, lo más seguro es que te quedas en la oficina más tiempo para verla.

—No es así, tengo que arreglar los libros de cuentas para mostrárselos, no es porque quiera verla.

—Pero la amas.

Él me miró atentamente y soltó un suspiró.

—Estoy harto, piensa lo que quieras yo voy a dormir.

Lo vi marcharse, yo me quedé ahí parado, afuera de la cocina sin saber qué hacer con la cena que con mucho cariño había preparado.

Estaba perdiendo a Hyunjin, lo sabía y no tenía idea de que hacer para retenerlo a mi lado, para que me mirará sólo a mí y en su mente sólo estuviera yo.

Cansado también de la situación, volví a la cocina y tiré todo a la basura, no tenía caso guardar la cena, para mañana las carnes estarían duras y poco comestibles, poco a poco me di cuenta de que estaba cansado de estar en una relación unilateral, pero no tenía las fuerzas suficientes de dejar a Hyunjin. Era mi esposo, y para bien o para mal, el contrato de nuestro matrimonio, el cual había empezado como un negocio se había vuelto amor para mí.

Amaba a Hwang Hyunjin, por increíble que parezca, amaba a mi esposo.

Camine hasta la habitación y lo observe ya acostado, durmiendo tranquilamente. Preferí darme una ducha antes de que entrará a la cama, mientras el agua tibia recorría mi cuerpo, imágenes de Hyunjin en la adolescencia se presentaban en mi cabeza, era imposible que no me enamorara de él si no podía recordar a más personas estando a mi lado como lo hizo mi mejor amigo.

"Mejor amigo"

Ya no podíamos considerarnos así, ya no lo éramos, ya no hablábamos como antes y sólo nos entendíamos cuando teníamos sexo, la amistad, el amor, ambas necesitan de algo fundamental para funcionar, comunicación y entre nosotros eso había desaparecido. Admito que tuve mucho que ver, cuando subí a la cama con el pijama puesta me aguanté las ganas de abrazar a mi esposo por la espalda.