Júlia's P.O.V
-¿Liam?-le pregunto al ver que no recibo respuesta.-¿y Clara?
Él se incorpora, desvía la mirada y aclara su garganta antes de responderme.
-Me parece que está en la cafetería.
Recogemos todo lo necesario y nos movemos hasta buscarla.
-No tengo hambre, id vosotros.-dice cuando llegamos.
-Tu madre dijo que vinieras.-le insisto aunque le veo más animada.
-Me acabo de comer un croissant.-señala su plato vacío y yo sonrío.-bastante bueno, por cierto.
-¿Estarás bien?-le pregunta su hermano quién deja un beso en su cabeza cuando ella asiente.-cualquier cosa me llamas.
Liam y yo caminamos por los pasillos siguiendo las indicaciones del lugar del restaurante y al llegar allí, un camarero nos acompaña a una mesa para tres al lado de la ventana.
-Es preciosa.-se me escapa el comentario cuando veo la ciudad iluminada bajo nuestros pies.
-Sí, lo es.-cuando desvío la mirada, mi mejor amigo tiene la vista fija en mí.
Quería hacer algún comentario para cortar este silencio pero el camarero viene con las cartas.
-Es todo muy caro.-bajo el menú de mi vista y él sonríe.
-Tranquila, invito yo.-bromea, ambos sabemos que la cuenta corre a nombre de nuestros padres.
-Tampoco hay nada que me guste.-vuelvo a analizar la carta para asegurarme, pero todo tiene nombres raros y las cosas que entiendo no me gustan o no me apetecen.
Cuando dejo de leer, Liam está de pie a mi lado.
-¿A qué esperas?-me dice con una ceja levantada.-vámonos a otro lado.
Una sonrisa de lado se dibuja en mi cara y ambos salimos de este lugar.
Las calles iluminadas por los adornos navideños nos envuelven mientras discutimos sobre donde ir a cenar. Al final acabamos optando por el mismo sitio de siempre.
-Un happymeal con nuggets y manzana de postre.-veo como Liam levanta las cejas a mi lado.
-¿De verdad?-pregunta cuando el trabajador se va a preparar nuestro pedido.-¿prefieres un trozo de carne sospechoso que una lubina en un hotel?
-No me mires así, o sino no compartiré el juguete.
...
-¿Quieres algo más?-pregunta después de haber comido todo entre distintos temas de conversación.
Suspiro contenta, hoy ha sido una noche como las de antes.
-Un helado estaría bien.
-¿Helado en noviembre?-asiento contenta mientras me levanto y él me persigue.
Pido mi helado y salimos del lugar para dar un paseo. Me encojo un poco cuando salimos del restaurante porque no cogimos nuestros abrigos al salir. Agradezco haberme puesto una camiseta interior.
-¿Está bueno?-escucho como me pregunta cuando ya casi me lo acabo.
-¿Acaso quieres?-sacude sus hombros y me mira de refilón, estoy segura que quiere una cucharada.-pero si es noviembre...-me burlo de él.
El chico rueda sus ojos azules antes de pararnos en medio de la calle. Agarro un buen trozo y se lo meto en la boca, Liam limpia bien la cuchara para dejarla sin ningún rastro. Menos mal que a mí me dan igual las babas.
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La misma historia prohibida
RomanceADVERTENCIA: ESTA HISTORIA CONTIENE LENGUAJE EXPLICITO Y MADURO. LEER CON PRECAUCIÓN. Para entender mejor esta historia es recomendable leer mis dos historias anteriores (Él está prohibido y Nunca te quedes con el primer vagón) ya que los protagonis...