El Libro De Destiny Midoriya (BNHA/OC)

#22: Virtualmente Vírico. [Parte 2] | "Valor".

Más temprano ese día, Ikki Katsurgi había sido invitado por uno de los chicos del nuevo Top 10 de héroes a ver un partido. Al vivir en la misma ciudad donde se llevaría a cabo el juego no lo pensó mucho y decidió acceder a la invitación de Sendo Heiten.

Al despedirse de su madre se aseguró de taparla con una manta, se puso su chaqueta con su estoque replegable y se encaminó al estadio que no quedaba realmente lejos de su casa.

"¿Palomitas?". Le ofreció Sendo una vez que encontraron asientos.

"Gracias". Ikki tomó la botana a unos minutos que empiece el partido. "En la otra grada está el anterior Top 10".

"Supongo que hasta ellos tienen sus formas de divertirse".

"¿Por qué hablas de ellos como si fueran totalmente apartes?".

"Porque lo son. Nos llevan meses de ventaja, no lo olvides".

Ikki no quiso preguntar. No quería verse involucrado en una de esas rivalidades de clases de las que había escuchado quejarse a algunos alumnos del Top anterior el día del examen.

"¿Y eso que me invitaste aquí?". Cuestionó, queriendo cambiar de tema.

"Fuiste el primero que encontré en mi lista de contactos".

'Viejo, eso es... muy triste...". Pensó el espadachín. 'Aunque no soy quien para quejarse...'.

A lo largo del partir hubieron emociones por doquier, la gente festejaba, gritaba. Todo el partido fue una lucha por ver quién se sobreponía a quien.

Por más que el Raven Star atacaba cambiando su estrategia, el Silver Knights se adaptaba como un organismo y contrarrestaba cada intento de gol.

Cuando entro Ruby el partido cambió el ritmo a uno más estratégico, pero eventualmente perdieron su ventaja. Cuando entró Destiny fue lo mismo, casi un gol de ella pero fue bloqueado por Iida en un acto temerario bajando todo el campo para tapar el disparo.

Entonces pasó, ese monstruo apareció de la nada y atacó, miró directamente la grada donde estaban Ikki y Sendo, disparó su láser y todo se volvió negro aunque lograron esquivarlo.

Ikki logró salir de una pila de escombros con algunos huesos rotos. Sendo a su lado hizo lo mismo.

"Uhh viejo... No vuelvo a ir a un partido en mi puta vida". Se quejó el peliazul que controlaba la sangre.

Ikki ayudo a Sendo a levantarse y este empezó a tratar su propia hemorragia.

"¿Donde estamos?".

"Creo que en las plantas bajas del estadio". Respondió Ikki. "Hay que subir, quién sabe qué esté sucediendo allá".

"Tienes razón".

Ikki desplegó su estoque y lo amarró a su cintura por si las moscas. Sendo solo se estiró los brazos, entonces lo escucharon.

Atrás de ellos hubo una explosión que iluminó todo con luz naranja. Al darse la vuelta Ikki desenfundó su estoque y Sendo creó una guadaña con su sangre.

El monstruo se levantó, su ojo se recalibró y miró a su alrededor, se detuvo en los dos jóvenes.

"¡Oye, ¿quién eres y por qué hiciste esto?!"

"¡Sendo...!".

Impertinente como siempre, Sendo Heiten no le tenía miedo a esa cosa. Debería. Y mucho.

El monstruo dio un paso, y ahora estaba en medio de ellos, fue tan rápido que apenas lo procesaron.

Sendo recibió un puñetazo de dos brazos que rompió si guadaña, el golpe género una explosión naranja que hizo que Sendo rebote una y otra vez en las paredes cerradas, quedando muy mal herido, Ikki intentó sacar su Alfanje pero el monstruo lo detuvo agarrando su brazo, luego le dio un cabezazo seguido de una patada que lo hizo chocar con una pared y caer al suelo derrotado.