"Love On The Brain" ☙ | 𝗻𝗼𝗺𝗶𝗻

Revancha

—Ya suéltame, patán —Jaemin chilló, se mordió el labio inferior con fuerza mientras era atado a un árbol por el Alfa sin cerebro en frente de él.

Jeno sonrió amplio, terminó de atar las muñecas del omega en el tronco del gran sauce y se apartó al acabar.

—Te dije que me las ibas a pagar. —Murmuró con voz fría. Una sonrisa maligna se posó en sus ojos oscuros.

Jaemin rodó los suyos, el idiota barbárico era un retrasado.

—¿Te das cuenta lo que estás diciendo? Sólo tenía nueve en aquel entonces, ¿acaso estás castigándome por mi rebelde acto infantil? —Dijo con voz neutra. —Eres patético. —Continuó con maldad, tratando de manipular psicología. Pero el idiota ni parpadeó ante sus palabras, perfecto.

Jeno resopló.

—Tu maldito acto me costó la competencia, por tu culpa perdí la oportunidad de luchar con animales alienígenas muy feroces. No te puedes quedar sin un castigo. —Gruñó de mal humor.

Jaemin lo miró de arriba abajo, genial, el maldito hijo de perra era totalmente su tipo, ¡Dios! Uh, ¿Por qué siempre los chicos más guapos eran todos unos Alfas idiotas sin cerebro? Uff, Jaemin miró hacia un lado, no se podía dejar llevar por aquella espalda ancha, mandíbula cincelada y rostro atractivo como la mierda. Oh diablos, maldito patán atractivo.

—¿Acaso el Sicat te comió la lengua? Oh, no me vayas a decir que te quedaste mudo del mero miedo a morir. —Jeno habló encima de los pensamientos de Jaemin.

Unos segundos cargados de tensión transcurrieron, ambos se miraron con ojos brillantes y pulverizadores, era una maldita guerra de miradas.

—Desátame —Jaemin demandó con voz profunda.

—Oblígame —Jeno respondió con aires de ganador.

Segundos de tensión se posaron en el aire a su alrededor. Jaemin frunció los labios, decidió jugar con la psicología otra vez.

—Para un Alfa que se considera dominante debe ser bastante extraño estar todo encima de un chico omega de la misma índole, ¿no? —Murmuró con una sonrisa maliciosa. Bien, el Alfa agarró el bate.

—Yo no estoy todo encima de ti. Estoy vigilándote. —Expuso con voz pesada e irónica.

Jaemin soltó una risita.

—Seguro, tal vez me tienes miedo. Claro eso debe ser, por eso me tienes amarrado al sauce. —Expresó con voz jocosa. Su idea era pellizcarlo de los nervios, agitarlo a tal punto que el chico no tuviera más opción que desatarlo.

Jeno se acercó a su rostro, agarró su barbilla con dos dedos y lo enfrentó: —¿Qué crees que estás haciendo pequeño omega? ¿Eh? —Dijo mirando fijo en sus ojos color violeta. Jeno parpadeó, los ojos violetas en cuestión cambiaron a un color azul en un par de segundos y luego regresaron a su color natural. Bien eso fue extraño, pero al parecer sólo él lo notó. Raro.

—Quiero que me liberes, obviamente. —Jaemin rezongó con nariz arrugada. —¡Ya suéltame, mono terrícola alienígena! —Chilló lanzado una patada al aire.

Jeno chasqueó la lengua, iba a tener que atar sus pies también.

—Estamos bien alejados del lugar, además el cantante ya está tarareando sus canciones. Nadie te encontrará aquí. —Indicó con maldad, mientras ataba los pies de Jaemin al árbol.

—Te odio. —Éste dijo mirando en sus ojos.

—El sentimiento es mutuo, omega malcriado. —Jeno puso una mordaza en su boca y lo silenció.