Deséame Suerte

Realidad y Fantasía

Hoy conspiran mis suspiros

En contra de mis ganas cuando pasas

Y te miro

Y más allá de lo instintivo

Tus ojos tienen algo que me deja pensativo

Y si te doy mi vida

Y no es de tu medida, amor

Verás que el mejor sastre

Es hacer un desastre con mi corazón

¿Qué se siente que me gustes tanto, amor?

Que debo de aceptar que

Tengo miedo de tu encanto

¿Qué se siente que me gustes tanto, amor?

Daniel, Me Estás Matando - ¿Qué Se Siente Que Me Gustes Tanto?

EXT. ENTRADA APARTAMENTO QUARTIER LATIN. TARDE. ¡No! Todavía no puedo poner nada del guion, hagan caso omiso, lo que sigue es de la no ficción.

 Apenas estábamos bajando las maletas del coche. No llevábamos mucho equipo, solo lo necesario en términos de cámara y audio. –Federico, ¡qué nos falta el estuche bel boom! Les daba instrucciones, pero esta gente no parecía obedecer. Sentí a alguien aclarándose la garganta.

- María, ¿qué quieres, tía? ¿Ya bajaron el vestuario de Patricia? María volvió a aclarar su garganta y señaló con su dedo gordo hacia una de las paredes al lado de la entrada del hotel.

- Amelia...Lo dije solo para mí.

Di los pasos necesarios, pero sin correr. Llegué hasta ella, le agarré la cara haciendo que sacara los labios y los mordí suavemente estirando hasta que naturalmente fueron liberados. Me quedé mirándolos. Pasé mi pulgar repetidamente por ellos. - Estos son el cielo. Le dijo sin creerme que estaba con ella. Volví a enfocarme en sus ojos y su sonrisa era tan grande que sus ojos estaban entrecerrados.

– "Es casi una experiencia religiosa, sentir que resucito si me tocas". Me dio una ráfaga de picos y tarareaba.

- ¡Qué tonta eres! Le di un empujón en el hombro juguetonamente.

- ¿Cómo sabías que veníamos a este sitio? ¡Tú (beso) estás (beso) vetada (beso) de(beso) mi(beso) rodaje? Le preguntaba sin querer desengancharme.

- ¿Tú (beso) eres (beso) la (beso) única (beso) que (beso) puede acosar (beso) a mejores (beso) amigas para (beso) que le hagan favores? Me respondía sin querer desengancharse.

Nos separamos un poco y qué par de tontas éramos.

- Estoy muy decepcionada, juraba que te ibas a ir pa' atrás. (Se le salió un puchero)

- Para adelante es mejor. (Compartimos un beso profundo que llevaba semanas siendo temperado)

- Mil veces, mejor. Me decía con esos ojitos a medio abrir triangulando mi rostro.

- Amelia, me tengo que fijar en lo menos importante para no irme a cambiar mi tiquete ya y mandarles un mensaje a mis padres - Familia, ¡los abandono! Caí en las redes de un espectáculo de mujer que me está enamorando. ¡Y me quiero dejar enamorar! ¡Cuiden bien del gato! Lo estaba gritando como si fuera la mejor actriz en una obra de Shakespeare.

- Cariño, ¡tú no tienes gato! Decía envuelta en una sola carcajada.

- Pues, cuando vaya a recoger mis cosas, antes de ir al aeropuerto me lo compro y se los dejó. Toda persona que se va a por una mejor vida siempre abandona a su mascota. Lo dije gesticulando con mi dedo índice como si fuera lo más evidente del mundo.