Cuando el amor es amor no se mira el color o el sabor...
El amor es amor, eso es lo que es.
A veces vemos cosas que son y cosas que no son.
Pero el amor es esa persona que ve tus cicatrices y aún así se queda a besarlas....
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Agosto 2022...
Gavi estaba extremadamente eufórico hacía exactamente dos días que cumplió la mayoría de edad, había festejado su cumpleaños con su familia en Sevilla, con sus compañeros de equipo del Barça en un pub y ahora se estaba alistando para salir rumbo al aeropuerto donde realizaría un viaje con sus amigos alias "La pandilla" a Ibiza, habían pasado varios años desde la última vez que los los ocho, nueve contándolo a él fueron de viaje juntos.
— Cuídate mucho ¿Si? Nos avisas al llegar —pidió su madre sosteniéndole del rostro y llanandolo de besos.
— Si, mamá tú tranquila — respondió por enésima vez en el día.
No lo mal entiendan él ama a su madre, con todo su ser, pero no es ni el primer ni último viaje que él esta haciendo, la única diferencia es que ahora ya lo pueden procesar legalmente como adulto.
— Ay mamá ya déjalo que lo asfixias al pobre —interrumpió su hermana mayor Aurora.
Agradeció con la mirada a su hermana ya que su madre lo estaba ahogando con tantos besos.
—¿Quién dijiste qué te iba a buscar? —cuestionó su padre cruzado de brazos.
— Roma.
Su padre hizo un ruidito en desacuerdo con la garganta.
—¿Qué pasa? —miro con el ceño fruncido al mayor.
— Pues que esa chavalita no me cae en gracia —arrugo la nariz.
<<—Pues a ella tampoco le caes en gracia, Papá>>
Pensó el menor recordando la vez en que Roma le había dicho que no podía creer que a su padre le molestase que ella siendo dos años mayor que su hijo sean amigos o la vez en que se molestó cuando opinó algo sobre que no tenía nada de malo el aborto ni la comunidad lgbtqi+. Cosa irónica que le moleste al hombre ya que su hijo menor formaba parte del colectivo pero aún dicho tema era desconocido para él.
—¿Por? —inquirió Aurora — Si Roma es un amor, además es la mejor amiga de Pablito.
— Es muy...latosa —bufó — Además de ser muy contestona. No me gusta.
Gavi rodó los ojos, lo a aquel hombre no le agradaba era que su amiga no se dejaba intimidar por nadie y siempre le respondía a los comentarios despectivos que hacía sobre cualquier tema.
— Es una chica muy dulce —señaló Belén con una diminuta sonrisa — Aunque no me parce que sea bien visto que sea la única mujer entre tantos hombres.
— No tiene nada de malo —afirmó el menor.
Antes de que su padre pudiera replicar el claxon del audi verde olivo de la ojigris resonó en el lugar, haciendo que el menor cogiera su maleta y se colocará las gafas de sol dispuesto a salir.
