Capítulo 30

1.1K 133 4
                                    

Más tarde, salí de mi habitación ya vestido para irme a la cafetería, no sin antes ayudar a Seol con sus deberes, voy bajando las escaleras de la mansión para salir de ahí y dirigirme hacia la cafetería donde Jimin me está esperando, envío un par de mensajes informándole que ya voy de camino antes de guardar mi teléfono y levantar la mirada - Ah... Señor Jeon - exclamo sorprendido de verlo sentado en el sofá con su típica cara neutral - Creí que seguía en su despacho

- Cambié de opinión. Decidí acompañarte esta noche. No quiero que nadie más se acerque a ti, Kim - sonrió con malicia

Parpadeo un par de veces intentando que mi cerebro procesará la información - ¿Qué? - interrogo sorprendido ante sus palabras antes de comenzar a reírme de los nervios - ¿Está bromeando, no Señor Jeon? - digo entre risas

- No estoy bromeando, Kim. - dejo de reírme de inmediato - Esta noche me aseguraré de que nadie más se acerque a ti. Ahora vamos, no quiero perder más tiempo - dice con autoridad mientras me toma del brazo y salimos de la mansión

- Pero... pero Señor Jeon, Seol se va a quedar solo - digo preocupado mientras me lleva arrastras hacia la cochera de su mansión

- No te preocupes por Seol, Kim. Le he dejado instrucciones claras a los empleados para que se encarguen de él. Ahora, nuestro destino es la cafetería y no hay tiempo que perder - informa con firmeza mientras entramos en el coche.

Suspiro antes de mirar mis manos ya sentado en el coche del Señor Jeon, esto no podía estar pasando, necesitaba desahogar lo que pasó anoche con él con Jimin, no necesitaba que el Señor Jeon fuera conmigo para confirmar los hechos, ¡ES NOCHE DE SOULMATES! Además teníamos un acuerdo - ¿Por qué quiere ir conmigo Señor Jeon? - interrogo de nuevo en un susurro - Se va a aburrir, le aconsejo a que no vaya

- No me interesa tu consejo, Kim. Iré contigo y eso es definitivo. No hay lugar para tus opiniones en esta situación - responde con frialdad mientras enciende el motor

- Pero Señor Jeon...

- No discutas más, Kim. Estoy decidido a ir contigo y eso no va a cambiar

- ¡Esto no estaba en el contrato! - exclamo fuertemente cuando veo que realmente no llegaré a nada si hablo con miedo, él ha comenzado a conducir.

- Los contratos pueden ser modificados, Kim. Recuerda quién tiene el control aquí - habla con una sonrisa fría mientras sigue conduciendo a la cafetería.

Abro la boca sorprendido antes de cerrarla intentando pensar, hasta que recuero la Regla #7 - Un acuerdo no puede ser cambiado de la noche a la mañana si la otra parte no está de acuerdo... - le recuerdo - o no sabe de la modificación del trato - agrego

- En este caso, Kim, eres mi esposo. No necesitas estar de acuerdo conmigo para entenderlo - concluye mientras apaga el motor del coche cuando llegamos a la cafetería.

- ¡Pero Señor Jeon...! - inicio de nuevo - ¡Usted me prometió que podía salir con mis amigos cuando yo quisiera! - le recuerdo cuando lo veo bajar del auto y rodearlo hacia donde yo estoy, abre la puerta de mi lado y sonríe

- Los acuerdos pueden ser flexibles, Kim. No te preocupes por tus amigos, yo siempre estaré ahí para ti - dice con una sonrisa falsa - Además... sí estoy cumpliendo con mi parte del trato, porque te deje venir a ver a tu "amigo" solo que nunca mencione que yo iría contigo

- ¿No le molestará que las personas se acerquen a tomarse fotos con usted y pedirle autógrafos? - interrogo - Tiene tiempo aún para irse a casa, se que no le gustan las aglomeraciones, ya sabe, ser el CEO más importante de todo Corea tiene sus desventajas a veces

Señor JeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora