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Joshua y Hyejin estaban emocionados por la noche que les esperaba. En su octavo aniversario, celebrarian su amor de una manera especial: asistiendo a una presentación en vivo de la banda sonora de su película favorita en un teatro histórico de la ciudad.
Para ellos, este evento era más que una simple salida; era una oportunidad de sumergirse en la música que había marcado los momentos más significativos de su relación. Desde el principio, Joshua y Hyejin compartían una conexión profunda y única. Se conocieron en la universidad, donde ambos estudiaban música. Sus pasiones compartidas por la composición y el arte los unieron instantáneamente, y rápidamente se convirtieron en inseparables. Juntos, crearon una sinfonía de amor y complicidad que resonaba en cada nota de su vida juntos.
A lo largo de los años, enfrentaron desafíos y celebraron triunfos juntos. Desde conciertos en pequeños clubes hasta viajes por el mundo, cada experiencia fortaleció su vínculo y los acercó aún más. Había algo mágico en la forma en que se entendían mutuamente, en la manera en que sus personalidades complementarias se equilibraban perfectamente.
El día de su aniversario, la emoción en el aire era palpable. Ambos estaban emocionados por la presentación en vivo, pero también por la oportunidad de celebrar ocho años de amor, risas y momentos compartidos.
Se vistieron elegantemente; Hyejin llevaba un vestido de terciopelo rojo, con un abrigo blanco que caía hasta sus caderas. Su pelo negro delineaba más su rostro y marcaba sus ojos oscuros. Mientras que Joshua, con su traje negro y corbata roja, peinaba su pelo en un estilo muy característico de él. El castaño miro a su pareja cuánto ésta le llamó.
—¿Qué tal me veo? —cuestionó, dando lentamente una vuelta sobre la punta de sus tacones.
Joshua sonrió enormemente mirando a Hyejin. Desde siempre, ante los ojos de Joshua, Hyejin era la mujer más hermosa de todas. No lo pensaba solo porque fuera su pareja, y quizás, la madre de sus futuros hijos, si no porque en realidad su mujer era inegablemente bella.
