ʜᴏᴍᴇ

Capítulo 10

Taehyung pasa la noche despierto.

Pensamiento. Llorando un poco. Sólo me preguntaba qué debería hacer.

Bueno, él sabe lo que tiene que hacer; él sabe muy bien qué es lo mejor que se puede hacer en este momento, cuál sería la mejor solución para todos: debería dejar ir a Yoongi.

Es lo mejor por el bien de la manada y también por el de Yoongi, le evitará comenzar una guerra con la otra manada mientras intenta liberarse de su apareamiento arreglado. Les evitará muchos problemas.

Pero al igual que cuando Taehyung estaba indeciso sobre confesarse con Yoongi o dejar pasar a la persona que le gusta, no puede elegir la opción que le haría dejar atrás a Yoongi y seguir adelante. Cuanto más intenta ser racional, más incapaz se encuentra de no escuchar lo que su corazón (y su lobo) le dice.

Tal vez debería escuchar a Yoongi y apoyarlo mientras intenta hacer otra negociación con el líder de la otra manada. Quizás no debería darse por vencido ya.

Aún sin saber qué hacer, Taehyung espera con impaciencia a que llegue la mañana, sabiendo que ahora sólo hay una persona con la que puede hablar y que puede hacerle reflexionar sobre qué es lo más correcto hacer.

Entonces, cuando el sol ya ha salido por unas horas, Taehyung se lava y se viste antes de salir de casa. Se siente cansado, pero no con sueño; Intentó muchas veces conciliar el sueño la noche anterior, pero no pudo. Se sentía inquieto, su mente demasiado despierta, demasiado llena de pensamientos, y sentía una pesadez en el pecho que era tan opresiva que nunca habría dejado que el cuerpo de Taehyung se relajara lo suficiente como para conciliar el sueño.

Taehyung no está en su mejor forma y le duele un poco la cabeza, pero necesita hacer esto, necesita hablar con Sunmi; así que empuja su cuerpo para trasladarse a la casa lila, esperando que el líder no haga que Taehyung se vaya.

Realmente no sabe qué esperar de Sunmi, no sabe si ella está enojada con Taehyung por lo que ha causado, o si simplemente le dirá a Taehyung que deje en paz a Yoongi sin escuchar lo que Taehyung tiene que decir.

Entonces, cuando Sunmi abre la puerta de su casa, después de que Taehyung ha llamado tímidamente, el omega deja de respirar por un momento, paralizado. Esperando ansiosamente.

Se miran y por un momento todo queda en silencio, incluso la mente de Taehyung. La expresión de Sunmi es seria e impenetrable. Pero después de que pasó ese primer momento, la expresión de Sunmi se suaviza, y antes de que Taehyung pueda siquiera darse cuenta, la mujer lo abraza, haciendo que el cuerpo del omega se relaje por completo.

Finalmente, en esos largos segundos en los que Sunmi sigue abrazándolo, haciéndole saber en silencio que nada ha cambiado en la forma en que lo mira, Taehyung sigue sintiéndose en paz. Sin dolor de cabeza, sin miedo, sin peso opresivo en el pecho.

Sólo alivio. Mucho alivio y saber que no está solo en eso.

"Entra, estaba casi segura de que habrías aparecido", le dice Sunmi alejándose de la puerta e invitando a Taehyung a entrar con un gesto del brazo.

No empiezan a hablar del asunto de inmediato. Sunmi se da cuenta de inmediato de que Taehyung no ha dormido nada y cuando Taehyung le dice que ni siquiera ha desayunado todavía, ella lo apresura a sentarse a la mesa y caminar hacia la cocina.

Taehyung quiere protestar, diciendo que no es necesario, pero sabe que sería en vano; Además, hace que Taehyung se sienta un poco mejor, la idea de ser cuidado y cuidado, principalmente por la figura que le recuerda a Taehyung principalmente a la madre que en realidad nunca tuvo pero que siempre había deseado tener.