Castigo

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-Continuamos-

-Narra Narrador omnisciente-

-Al día siguiente-

-Aposentos de Indra-

Algo alejados del grupo, Vali se había parado sobre una pequeña colina, listo para que Albion le llevará al imperio de los dragones.

Vali, te lo preguntare una vez más, ¿estás seguro de querer ir?- Albion sabía mejor que nadie lo obstinado que podía llegar a ser su compañero, pero también tenía una ligera idea de que clase de castigo podría recibir al llegar al imperio.

Jamás dudó Albion, solo llévame al imperio.- Con la respuesta obtenida, Albion comenzó a rugir de manera armoniosa y cuando paso un minuto se detuvo.

¿Seguro que eso funcionaba estando en territorio indú?- Saeko preguntó bastante escéptica o eso fue hasta que vio a Vali atrapado en un tubo de luz y siendo teletransportado.

Si, la magia de los regentes no conoce de limites territoriales.- Indra comento mientras se sacaba cerilla de la oreja.

-Imperio dragón, entrada-

Vali vio a su alrededor y se encontró con aquella caseta en donde Jezz estaba resolviendo un crucigrama; estaba vez no había una inmensa fila, así que Vali camino hacía aquella caseta como Albion se lo indicó.

Jezz, que gusto me da...- Jezz puso su garra enfrente de Vali y eso hizo callar a Albion.

Dales unos momentos, Albion, ya vienen por tu portador.- Vali al escuchar eso quiso prepararse para pelear, pero justo antes de hacerlo un látigo de energía dorada se enredó en sus piernas y con una increíble facilidad fue arrastrado por el suelo.

Buena suerte, descendiente de Lucifer.- Jezz dijo antes de regresar a su crucigrama.

Vali intentó quitarse el látigo de sus pies, pero no era capaz de hacerlo, así que intentó detenerse pero la fuerza de quien tiraba de él era demasiada que si intentaba sostenerse de algo, esto se rompía o simplemente cedía ante la fuerza de su captor. Finalmente luego de ser arrastrado por 1 minuto entero fue arrojado hacía el cielo y el látigo que lo aprisionaba desapareció y le permitió recuperarse antes de caer en medio de los cuatro regentes.

Pequeño portador de luz, ¿qué rayos haces en nuestro territorio?- Con un tono tranquilo, Quetzalcoatl cuestiono a Vali, quien quiso responder de inmediato, pero al ver a quien le había hecho la pregunta, se quedo mudo ante la imponente aura que liberaba el líder de los dragones.

No quieres hablar, bien, tampoco es que nos importara tu respuesta. Emiratos, libera a Albion.- Vali abrió los ojos ante la orden de Quetzalcoatl y antes de que reaccionara, Emiratos lo hizo arrodillarse y atravesó su espalda con su mano; la divine dividing se activo un momento y Emiratos sacó su mano con una esfera de color blanco en ella. La esfera al ser tirada al piso comenzó a tomar la forma física de Albion; un enorme dragón blanco, de ojos azules y dos enormes cuernos color amarillo que salína de la parte de atrás de su cabeza.

Albion...¡Maldito, me mentiste solo quer...Ahhhh!- Vali se sintió sumamente traicionado al ver como Albion recuperaba su forma física, pero antes de poder gritarle, Saltur le arrojó un rayo de energía oscura que le causo el mayor dolor que haya sentido jamás.

Se le advirtió a tu gente lo que les pasaría si ponían un pie en este lugar.- Quetzalcoatl se acercó al arrodillado y herido chico, quien luchaba para ponerse de pie.

Y nosotros siempre cumplimos nuestra palabra.- Los ojos de Quetzalcoatl brillaron en color negro y Vali juró ver pasar su vida frente a sus ojos una y otra vez.

"Necesito una oportunidad"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora