¡¿Nuestro?! ¡Es mio ahora! ↠ KOOKMIN ↞

20.

JUNGKOOK:

Con Taehyung metido en su habitación y aprovechando que el domingo aún no termina, decidimos no desaprovechar ese tiempo de sobra. Besos y caricias van y venían entre los dos, Jimin apenas pudiendo mantenerse quieto porque nuestros cuerpos no dejaban de moverse entre sí tratando de estar friccionandonos lo más que podemos.

— Ah, kookie.— aquello salir de sus labios hinchados por los besos me enloqueció que rápidamente lo desnudé y me desnudé también para tener más contacto entre pieles.

— Gatito... ¿Quieres esto? — una pregunta innecesaria quizás por lo excitado que se ve pero a mi parecer tenia que hacerla para estar seguro que no lo estoy presionando a hacerlo.

Jimin asintió enrollando sus brazos en mi cuello y jalandome encima de él para besarlo. Acto que hago con mucha pasión, haciéndole gemir bajito en mis labios y trato que siga así porque tampoco queremos que Taehyung se entere de lo que estamos haciendo. Sería vergonzoso que nos escuchara en plena noche de pasión. El gatito desliza sus manos por mi espalda acariciando de arriba a abajo mientras estamos distraídos en nuestras bocas pero es en eso que recuerdo lo que hablamos en el parque.— Gatito, tu querías saber que más me gusta, ¿Verdad? — él no siendo nada tímido como lo era antes asiente mordiéndose los labios, no se como aprendió a atacarme así con tanta sensualidad pero intuyo que de verdad cada vez que estamos juntos él aprende más y más, el placer lo entrena y lo vuelve un apasionado profesional e incluso creo que en algún momento será él quien me enseña nuevas cosas a mi en el sexo.— Bien, haremos el sesenta y nueve. Te va gustar, lo presiento.

— Te creo porque todo lo que hacemos me gusta.— contesta y noto un brillo en particular en sus ojos que es hermoso, apesar de la poca luz y apenas una lamparita pequeña de noche alumbrando la cama puedo notar ese brillo que me está encantando.

Es como ver a través de él. A través de su mirada puedo notar lo mucho que ama este momento conmigo. Y es la primera vez que noto ese brillo en alguien que esta conmigo. Vuelvo a regañarme mentalmente por comparar a mis parejas pero a Dayane nunca le note ese brillo en particular cuando esta conmigo... ¿Será que no nos entregamos lo suficiente?

Mierda.

No es momento para pensar en eso.

Regreso a la realidad de ese momento, a la hermosa realidad que está debajo de mi esperando con ansias que le enseñe lo que es el sesenta y nueve.

Y no tardo más. Le indico como debe acomodarse encima de mi, él obediente hace caso dejando su hermoso trasero cerca a mi rostro y mi pene esta cerca del suyo.

Entonces... — Hagamoslo.

Tras mi palabra iniciamos. Él tomando mi pene y dando lamidas inexpertas pero gustosas para mi. Para evitar gemir empiezo abriendo esas nalgas esponjosas y hundiendo mi lengua en ese pequeño agujero, siendo recibido por descargas pequeñas de su lubricante natural. Sabia como a un manjar aceitoso y dulce, no fue asqueroso como leí en internet así seguí lamiendo obteniendo más y más. Con una mano me ayudo a mantener esas nalgas abiertas para mi y con la otra masturbo su pene que estaba muy endurecido.

— ¿Te gusta de esta forma? — pregunto dejando mi acción unos segundos.

— Si, me gusta.— y continuó, gimiendo con mi pene en su boca, masturbando  lo que no le cabía en ella.

El primero en correrse es Jimin. Tanto por delante como por detrás. Su pene soltó chorros de semen y sus piernas se debilitaron por lo que lo sostuve de las caderas empujando más y más mi lengua hasta conseguir que se apretó alrededor de ella y un gran chorro de lubricante terminó inundando mi boca. Sonreí satisfecho ante esa imagen y eso sumándole que Jimin hacia un excelente trabajo que termine corriendome en sus labios.