Flores amarillas

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Blas veía el cuchillo afilado subir y bajar rebanando de a poco un kilo de zanahorias, lo cuál le parecía una exageración, Enzo lo había invitado a cenar y Matias estaba preparando una comida para diez personas.

-me parece cualquier cosa-se quejó, desclavando el cuchillo de la tabla de picar-desde que salen estás hecho un boludo

Blas le había dicho que esa tarde saldría con Esteban pero volvería a su casa a la hora de la cena, lo cuál a Matias le parecía mal

-no nos vemos tan seguido como yo quisiera-comentó el de rulos tomando una rodaja de zanahoria y mordiendola-es solo un ratito

-¿si es tu novio porque no lo invitas a cenar también? encima está lloviendo

Blas miró por la ventana y contempló el cielo violeta e iluminado.

-no somos novios

-¿entonces están saliendo?

-si, vamos tranqui

-¿entonces cogen nada más? me parecía que querías algo más...

-te estoy diciendo que no, salimos, hacemos cosas, el otro día tuvimos una cita linda...

-o sea salen y cogen, pero no son nada

-algo somos-murmuró él algo triste, en realidad hacia ya algunas semanas que salían pero no tenían un compromiso

Matías siguió cortando otras verduras y Blas tomó confianza para hablar con él acerca de algo que lo veía perturbando desde hacía semanas

-no sé que somos, no sé si él...¡es que es tan serio! está convencido de que está haciendo algo mal conmigo, entonces es como que toma distancia de mi, y hay días que estamos re del romance, pero en otros...no sé

-deberías plantearselo, entonces

-no, no quiero quedar como un intenso

-tenes que saber que quiere él, ¿si no como vas a saber si coincide con lo que queres vos?

-no me importa eso

-¿como?

-no importa si no coincide, podría amoldarme a él...

-¡no!-gritó Mati apoyando con fuerza el cuchillo en la mesa

-bueno, si te pones asi...

-ya sé que fui yo el que te dijo que sos denso, pero no es así, no quiero que estés mal, vos sos alguien que..que..¡siente mucho! y no deberías ocultar eso

Aquéllo se quedó en la mente de Blas, incluso después de irse de la casa de Mati, rumbo a verse con Esteban.

●●●

Tuvo que hacer algo de tiempo para ver a Esteban pero la espera había valido la pena,el rubio había llegado a la esquina acordada con su saco empapado de lluvia, el cabello goteando sobre sus hombros y un hermoso ramo de flores amarillas en una mano.

-que romántico ¿a quién se las robaste?-preguntó Blas igual de mojado, sosteniendo las flores en la mano. le gustaba molestarlo pero en realidad estaba totalmente emocionado por el regalo, eran sus flores favoritas

-a nadie, pero tu mamá no las quiso, así que...

-ah de descarte, me gusta-comentó el de rulos, oliendolas

-¿yo te gusto?

-vos me encantas-respondió él mirandole la boca con deseo

se besaron bajo un pequeño techo que apenas los cubría del agua.
Esteban lo tomaba firme de la cintura con ambas manos mientras Blas sujetaba su nuca con una mano y la otra aún sostenía las flores.

-¿que te pasa? estás serio-le preguntó algunos largos minutos después, dandose cuenta de lo apesadumbrado que Blas parecía estar

-estoy bien, solo...nada, no te preocupes

-¿sabes que te conozco mucho yo a vos, no, chiquito?

-si-murmuró Blas mirando las baldosas mojadas

-y decime, bebé, dale

-es que...hablé con Mati sobre vos hoy, él dice que tengo que hablar con vos sobre...lo que siento y saber lo que sentis vos, porque yo soy sensible y...¡soy un pelotudo! nada más, no me des bola

-no digas eso, yo no estoy jugando con vos ni nada...

-ya lo sé-murmuró nervioso jugueteando con algunos pétalos de las flores. Esteban aún lo sostenía de la cintura y lo miraba a los ojos

-¿que sentís por mi, Blas? siento que no me contas todo

Blas suspiró y se armó de valor

-es que yo estoy soy intenso y estoy un poco confundido sobre lo que hacemos juntos y que cosas queremos,o que cosas querés vos conmigo...

-mm

-no quiero apurarte, Mati es un exagerado...

-¿vos querés que estemos juntos?

-no, o sea, estamos bien, estoy bien, se tiene que dar lo que sea que...

-a ver, dame-le dijo quitandole con delicadeza el ramo de las manos.

Esteban se alejó algunos centímetros y se las ofreció nuevamente mientras apoyaba la otra mano contra la pared

-¿querés ser mi novio?

-¿pero es por lo que estamos hablando o porque...-le preguntó nervioso

-por que quiero que seas mi novio-respondió cayendo ante la tentación de besarlo un poco más

-¡si quiero,si quiero!-gritó emocionado con una sonrisa de oreja a oreja, tomando su ramo nuevamente, la felicidad que sentía le duraría el resto de la semana.

Chiquito: 𝐛𝐥𝐚𝐬 𝐱 𝐞𝐬𝐭𝐞𝐛𝐚𝐧Where stories live. Discover now