capitulo 14

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~Belrey~~
Despierto en un cuarto oscuro, muy adolorida a causa del  puñetaso que me dieron en el rostro, no sé como voy a salir de esta, la última vez Cayden fue quien me salvo del animal de Lorenzo, pero esta vez ni respondio a mis llamadas cuando queria contarle que vi a Lorenzo rondando mi departamento. Cayden ya sabe toda la verdad y realmente no entiendo que van a ganar teniendome aqui encerrada o matandome, escucho alguien abrir la puerta y la luz entra junto con un hombre que no logro desifrar bien  su rostro. 
 —Belrey, nos volvemos a encontrar...
Por su voz lo reconozco inmediatamente, el mismo cerdo que me propuso tener sexo con él para liberarme, no puede ser que este en manos de estos locos nuevamente.
—¿Que van a hacer conmigo?. 
deja la puerta abierta y se acerca a mi, segui sentada en el suelo sin ganas de ni siquiera intentar escapar, total ya no tenia nada que perder, estoy sola y a Cayden no le importa. 
 —Lorenzo quiere una nueva puta en el Bar,  y tú vas a ser una de ellas.
 —De que estas hablando? 
—Niña tonta. Raul trae las bolsa.
Entra un hombre con una bolsa y coloca en la cama y abandola la habitación.. 
 —Vas a bañarte y sacarte toda esa mugre que tienes, te dejo aqui la ropa que vas a usar, y pobre de ti si  vuelvo y no estas vestida ya, ah y no pienses que somos unos desconsiderados para tenerte en un cuarto oscuro. 
Se acerca detras de la puerta y prende la Luz, sale de la habitacion y me levanto rapido a revisar la ropa que me trajieron, casi me desmayo al ver lo que contenia, unas lencerias rojas, una bincha con orejas y un kimono junto con un zapato negro muy alto, agarro y tiro todo al suelo y voy al baño a bañarme, vuelvo a ponerme la misma ropa sucia que tenia y salgo. Busque algo en la habitación que me sirva para poder defenderme pero no habia nada, Lorenzo es quien entra ahora a la habitación. 
 —Di ordenes que te bañes y te pongas lo que te trajieron. 
 —No voy a hacer lo que quieren. Matenme de una vez por todas.
se acerca y me da una bofetada que me deja en el suelo. 
 —No estoy preguntando si quieres,  pontelo ahora. 
No le hice caso y me agarra del cuello. 
 —Terminare torturandote aqui si no lo haces. 
 —Esta bien pero sal afuera. 
Empieza a reirse y se sienta en la cama. 
 —No me atraes para nada, me gustan mujeres de verdad y no las tablas como tú. 
Agarro la maleta y voy al baño a cambiarme, por lo menos el kimono me cubre el cuerpo. 
Cuando sali ya estaba otro hombre junto con Lorenzo al verme, se acerca y me toma del brazo  y me saca de la habitación, seguimos caminando por un largo pasillo y escucho personas hablando. Cuando abrió una de las puertas  todos se callaron y me observaban, eran como 15 hombres, muy elegantes pero me imagino que son unas bestian que van a hacerme daño, intente salir del lugar pero el hombre era más fuerte que yo y me empuja al suelo, no pude levantar la mirada y solo quede ahi, escuche  a uno de ellos hablar. 
 —No trates así a la mercancia, o ya no nos va a servir. 
Todos se reian como si fuera algo gracioso, mientras que  yo estaba llorando del miedo.
 —Lorenzo, la compro. 
 —Yo la quiero, se ve fragil y eso le gusta a los clientes. 
 —El que pague más se queda con ella.
 me levanto e intento salir por donde entre pero vuelven a golpearme. 
 —Llevala de nuevo a su habitación, más tarde se larga de aqui. 
 —No pueden venderme, estan locos, todos van a ir a la cercel.. 
Por más que gritaba parece ser que a nadie le importa lo que dije.. 
Paso un buen tiempo hasta que vuelven a la habitacion y me ponen un trapo en la nariz.. 
Abro los ojos y me encuentro en una habitación un poco mejor de la que estaba anteriormente, unas chicas se acercan a mi. 
 —Hola, como te llamas… 
No entendia nada de lo que estaba pasando, quienes son estas chicas? 
 —Me llamo Belrey, ¿Qué es este lugar? ¿Quienes son ustedes? 
 —Soy Nicol, ella es Luna y la de rulos que aún duerme es Natalia, llegamos de la misma forma que tú, obligadas. 
 —Pero que van a hacer con nosotras. 
Me levanto de la cama y empiezo a caminar en circulos. 
 —Nos obligan a prostituirnos, no hay forma de escapar. 
Todo empezo a darme vueltas, no podia aceptar que ahora soy prisionera de unos locos, mis piernas tiemblan de miedo, solo quiero volver a casa y que esta pesadilla termine.
 —Tiene que haber una forma de irnos de aqui. 
 —Las que intentaron escapar fueron asesinadas. 
Natalia solo se sienta a un costado de la cama, miro a Luna, al parecer ya se resignaron a estar aqui, pero yo no, si muero en el intento de escapar no importa, no voy a dejar que nadie me ponga una mano encima, lo único que espero es que Cayden me busque o no sé que será de mí. 
 —Hay más chicas o solo son ustedes  tres? 
Natalia suspira y me contesta. 
 —Hay más habitaciones, pero nosotras somos las más jovenes por eso nos tienen a parte… suelen hacer una subasta y compran mujeres, pero la mayoria se quedan  aqui. 
No aguante y deje caer mis lagrimas , es desesperante, el lugar ni siquiera cuenta con una ventana, solo nos queda sentarnos a esperar que van a hacer con nosotras, todavia no logro entender como hay personas que pueden arruinar la vida de otros y seguir con su vida como si nada malo hubiesen hecho, deseo tanto que Cayden entre por esa puerta y me diga que todo va a estar bien y sacarme de aquí, no sé como va a terminar esto pero espero que pueda salir y volver a mi vida normal 
 
 
 

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