So This Is Love

Capitulo 5

                     Lo que se llamaría entusiasmo

25 de Julio de 1999.
Clovelly;Bideford
Reino Unido.
Domingo.

El día anterior había caminado casi por todo el barrio hasta el anochecer.
Al regresar a su autobús se hizo una cena instantánea y se sentó en su cama con un periódico del lugar, inconcientemente, buscaba un trabajo.

Al despertar el día siguiente desayuno y se puso acordé con su tarea.
Era tanta que fue terminando casi a las cuatro de la tarde.
Se hizo unas pechugas de pollo con espaguetis y salió con el plato en la mano sentándose en una silla que había sacado.
Desde donde se ubicaba podía observar todo hacia abajo de la montaña, el mar, los negocios, las casas. Abajo era todo armonía desde que tenía memoria.

Se sentía tan tranquila. Ya no sentía esa presión en el pecho que diariamente la atormentaba, ese dolor punzante en la cabeza, sus manos temblando, ya no se sentía débil.
Tenía energía y se sentía bastante alegre, incluso tal vez, sintió entusiasmo.

La noche anterior había encontrado un trabajo que llamó su atención, y claro, era en su cafetería favorita 'Clovelly's large mug'.
Esa cafetería a la cuál asistía cuando era más joven. La cafetería a la cuál recurría casi a diario con su compañía favorita.

Solicitaban barista. Ella era una gran experta en todo lo que tuviera que ver con café.
En sus 24 años había aprendido a ser una artista con el café. Solía prepararse sus propios expresos siempre con una decoración simple. Solo debía aprender algunas cosas más y sería perfecta.

Al atardecer bajo por la montaña con el periódico en mano.
Al llegar pudo ver a la ya conocida dueña del lugar. Estaba cerrando la cafetería en aquel momento.

-¡Señorita Bailey! -dijo en voz alta para que la escuchará y corrió un poco para alcanzarla.

-¡Carey! Por Dios hija, hasta que te dejas ver. -exclamo sonriendo y acercándose a Jade la abrazo.

-Espero no molestarla señorita Bailey -dijo al separarse y ver que ella sostenía ya sus llaves.

-No no para nada hija. Pasa anda, ¿Quieres un café? La casa invita -la jaló con suavidad haciéndola entrar al local.

-Es usted muy amable. La verdad es que vine a preguntarle sobre el empleo de barista. -observo como la señorita bajaba dos sillas de una mesa y la hizo tomar asiento.

-¡Justo iba a buscarte mañana para ese trabajo! Recuerdo lo que buena que eras haciendo todas esas decoraciones en los expresos cuando me ayudabas junto con Lori...-casi se arrepintió de decirlo. Nay Lori Gibson, la recordaba como la chica que siempre andaba junto a Jade. Se había tratado de evitar traer a Nay Lori a las conversaciones desde lo sucedido, ya era sabido por casi todos que Jade no lo resistía.

Jade al escuchar el segundo nombre de Nay en las palabras de la señorita Bailey solo hizo una mueca con la boca, agachó la mirada y sin darse cuenta sus uñas se enterraron en sus palmas.

-Lo siento. Así que, ¿Te interesa el trabajo? -dijo tratando de cambiar de tema lo más rápido que pudo, con un tono de preocupación.

-Sí.

-Genial hija. El trabajo ya lo tienes, tu solo dime en qué horarios quieres trabajar y cuando quieres empezar, ¿Sí? Será un enorme gusto tenerte aquí, te hemos extrañado todos en el barrio, mucho.

Jade asintió con un poco de tristeza. Desde siempre ella había sido muy amable con todos, hablaba con todos, todos la conocían, era una figura importante para aquel barrio.