𝓔𝓵 𝓸𝓻𝓯𝓪𝓷𝓪𝓽𝓸 -ᴴʸᵘⁿˡⁱˣ

𝓒𝓪𝓹 21

-Pequitas, me oyes pequitas-soltó hyunjin con una gran preocupación en su voz.

Mi cuerpo no reaccionaba, estaba sumamente dormido, mi corazón hacía todo lo posible por seguir latiendo pero la energía en ese lugar era tan fuerte que mi indefenso cuerpo no podía luchar.

-Vamos Felix, despierta-agarro mi cabeza y la puso sobre sus piernas-Se que puedes hacerlo.

Pero aun así,nada , yo no emitía nada.

-Al menos contestame maldita sea, se que estás ahí- gritó al borde de la desesperación.

Lo único que Jinnie llegaba a oír, era el sonido de mi respiración y corazón, nada más que eso.

Hyunjin acercó su oido a mi pecho para escuchar mi ritmo cardíaco, este se encontraba muy pero muy agitado iba a mil por hora.

-Pequitas, dulzura, Lixie- se que puedes oirme tan solo resiste.

Él estaba intentando hacer todo lo posible para rehabilitarme, se encontraba pronunciando unas palabras de idioma indescifrable mientras que una de sus manos sujetaba mi sien de la cabeza mientras que su otra mano se había puesto en mi frente.

Pero esas palabras no funcionaron, yo seguía sin reaccionar.

Jinnie estaba desesperado no paraba de balbucear cosas incoherentes y maldecir desde su lugar.
Maldecia ser tan estúpido como para haberme enviado, maldecia a aquellos seres inferiores que provocaron todo esto, maldecia el maldito momento que me eligió para cumplir esta tarea, maldecia a todo el orfanato.

Todo eso hacía hasta que dejo de escuchar mi respiración y corazón latir.

Desesperadamente tomo mi cara y quiso despertarme mientras decía todos los cumplidos por a ver en este mundo.

-Vamos mi vida reacciona por favor- llamo con lágrimas ya saliendo descontroladamente de sus ojos- Reacciona por favor!!!!!- grito hacía los cuatro vientos.

Estaba ahí mirandome sin poder hacer nada, mientras mantenía mi cuerpo entre sus brazos, dandome caricias y besos por todas partes. El quería que yo reaccionara pero ya era tarde.

Miro a la luna y suspiró mientras escondía mi cabeza en su cuello y me abrazaba sin querer soltarme.

Tomo con delicadesa mi cuerpo y fue a sentarse al banco que estaba allí en la iglesia, pero algo lo detuvo, él choco con algo.

Había chocado con su alma. La agarro del suelo y la miró, estaba apunto de tirarla lejos cuando penso.

El necesariamente la necesitaba o podría darsela para que recuperara fuerzas.

Y si se refería a Felix.

Rapido pero con cuidado dejo a felix apoyado de nuevo en el suelo.

Tomo la caja de hierro y con la poca fuerza que le quedaba la estaba abriendo.

Con suma delicadeza tomo aquel destello de luz del alma y lo presionó contra el pecho de Felix.

-Por favor, por favor yo se que tu puedes- se que eres valiente, mi amor, se que lo eres.

Esperó y esperó pero nada ocurrió y este al ver el resultado se largo a llorar sobre el pecho de su amado .

-Porque tuviste que dejarme-yo te amaba maldita sea, yo te amaba como nunca más ame a alguien en toda mi vida y existencia.
Lograste enamorar a un demonio Felix, pero me dejaste.

Hyunjin se quedo ahí sin moverse de su lugar tan solo quería disfrutar el último calor del cuerpo que su amado daba.

Se quedo así por un largo tiempo, estaba mirando a la nada mientras pensaba todos los momentos que había vivido con Lixie, con sus pequitas. Como él un demonio, no debería llegar a sentir nada, ni tener compasión por nadie y llegar a ser un hijo de puta, cayó, cayó por un humano.

Tan solo pensar en su amado lo ponía mas débil de lo que estaba. Definitivamente luego de esto no tendría empatia por nadie más que no sea el mismo.

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