Capítulo 4

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Días después, Jisoo estaba mucho más abierta a hablar con Rosé sobre cualquier tema, de hecho, habían desarrollado una pequeña complicidad.

Que sobre todo Jisoo intentaba ignorar, sus deberes de jefa debían estar por encima de todos esas pequeñas emociones que le generaba hablar con Rosé.

-¿Ya terminaste 25 21?-Rosé le dio una mirada triste.

-Si.-y tapó su rostro mientras Jisoo reía por lo bajo- ¿Disfrutas mi dolor?

Y Jisoo rió más fuerte.

-Al fin alguien comparte el mio.

-Todo fue apropósito.-se quejó y Jisoo la miró divertida.

La mayor se levantó y caminó hasta su escritorio tomándola por los hombros y poniendo una mirada indescifrable.

-Calma, pequeña Rosé, que aún te faltan muchos dramas tristes que ver.-y Rosé pataleó con sus ojos enrojecidos.

A Jisoo le divertía tanto verla, tenerla a metro y medio de su escritorio definitivamente estaba haciendo sus días mejores pero... ¿eso era bueno o malo?

La dejó ir luego de burlarse de ella por más tiempo mientras la rubia decía que se callara.

Se retiró de su oficina con de comprar algunos dulces en la pastelería de al lado, y cuando regresó solo los puso en el escritorio de la menor.

Quien la miró con atención.

-¿Para quien es esto, señorita?-Jisoo se acercó a ella, destapó el postre y se lo puso al frente.

-Para ti.

Y se dio vuelta para sentarse en su enorme escritorio.

Rosé pestañeó, y sin mucho esfuerzo empezó a comer el pastel que Jisoo le había regalado de la nada.

-Agh...-jadeó al probarlo, llamando la atención de Jisoo, quien la vio de reojo- Esta muy rico, Dios...

Jisoo tragó grueso.

¿Que mierda estaba pensando?

Debía salir de inmediato. Esos pensamientos no podían seguir en su mente.

-Me disculpas...

Y casi salió corriendo de su oficina chocando con Seulgi.

-Seul-

-Debemos hablar ahora mismo.-soltó muy enojada, haciendo que Jisoo frunciera el ceño.

-¿Que..?

-¿Dónde mierda están las visas de los invitados, Jisoo?

Ella tragó grueso.

-Deben estar listas en la embajada, ¿de que hablas?

Seulgi apretó los puños y cerró los ojos maldiciendo en voz baja, haciendo que Jisoo se cruzara de brazos lista para controntarla.

-No están. Nunca recibieron los papeles.-gruñó moviendo sus manos con fuerza.

Jisoo negó rápidamente.

-Eso es basura, yo misma hice el tramite y envié los documentos con el mensajero hasta la embajada.-replicó.

Entre ambas, ya habían pequeños rayos que salían de sus ojos listas para fulminante.

La jefa bufó.

-¿Con el mensajero, Jisoo?-esta asintió- Definitivamente estas loca si no sabes que despedí a Jeremy por beber en el trabajo.

Jisoo llevó su mano hasta su frente, completamente irritada.

-Maldita sea, ¿lo despediste en mi día de la semana más ajetreado y sin avisarme? ¡Por Dios!

Yes, Miss Kim | ChaesooWhere stories live. Discover now