22. Propuestas arriesgadas

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—Está bien estas asustado del dolor—cometa San un poco más serio en esta ocasión—. Una vez me rompí la cola y tuvieron que acomodármela... Mi papá me dijo que tener miedo al dolor es normal, también necesario. Demuestra que estas vivo y que tiene un alma... que no eres un monstruo.

— ¿Los monstruos no tienen alma?

—No. Por eso muchos humanos son monstruos—informa con una sonrisa larga y cruel al respecto—. Ninguno de ellos siente dolor, por ellos o por los demás. Solo destruyen todo... ¡Afortunadamente aquí no parece ser el caso! —exclama levantando de un salto.

Wooyoung lo sigue con la mirada. La forma en que se mueve es hipnótica. Tan fluida hasta el punto de parecer una animación. Como si no fuese real. Es una cualidad de los zorros, aunque es la primera vez que la ve desde tan cerca.

Usualmente no ve a nadie y cuando lo hace, todos se mantienen lejos. Después de todo, es un animal enfermo. No vale la pena aproximarse, no tiene familia que pase por alto aquel pensamiento.

—Aquí les interesa. Tanto que hicieron todo esto para ti y que te duela menos—Se balancea, sujeto al tubo que tiene una larga goma. Está seguro de que con eso sostienen las alas de Wooyoung para ayudarlo a limpiarlas—, pero ya eso no basta ¿Cierto? —cuestiona sonriente—. Ya no basta con que te cuiden.

El canario desvía la mirada.

—Quieres que te curen. Porque para eso te salvaron, no para sentir lastima de ti mismo cada día de tu vida.

San se acerca de nuevo, dando algunos altos juguetones y tomándolo de la cara. Los ojos verdosos del zorro clavados en los oscuros del canario.

—No es una buena vida. No vale la pena así. Para esto, mejor haberte dejado morir antes ¿O no? —cuestiona ladeando la cabeza y Wooyoung sufre un escalofrío—. Un dolor momentáneo y horrible para mejorar a futuro... ooooooo un futuro que siempre duela. Te queda a ti decir que quieres.

Es manipulación. Muchísima y es consciente de eso. sin embargo, es parte de su naturaleza. No lo puede evitar. Menos cuando sabe que puede lograr algo bueno con ello. Jugar un poco con la mente de los pacientes para animarlos a tomar el riesgo.

Es tomar mucha responsabilidad, por supuesto, es hacer que ellos acepten poner sus vidas e integridad en sus manos y él, debe cumplir con lo que tanto les habló y usó para endulzarles el oído. Hasta ahora, le ha ido bien. No ha habido ningún caso donde el tratamiento fuese contraproducente.

No quiere que Wooyoung sea el primero y con su situación siendo tan grave, desea fervientemente conseguirlo. Darle a este pájaro la capacidad de volar o al menos, caminar sin necesidad muleta para sostenerse. Es mucho que sostener, mas para eso es doctor.

Para lograr hasta lo más complejo y mejorar la vida de los que enfermaron.

— ¿Te vas a burlar de mí por llorar?

—Nop. Eso jamás. —Promete con una sonrisa. San masajea la cara de Wooyoung, quien amenaza con llorar ante la sola idea de lo mucho que va a doler.

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—Tengo un proyecto en mente y estoy seguro de que eres quien mejor puede ayudarme—Yeosang ulula, confundido ¿Él? ¿Ayudar? —. Quiero un abrir un caso legal por el abuso de los beastman de parte de ese grupo que te atacó.

—pero ¿Cómo puedo ayudar con eso?

Yeosang no sé considera a sí mismo alguien capaz de hacer algo así de importante. Es muy serio, muy grande y muy importante, a tal punto que no sabe cómo interpretarlo. Sabe qué es un juicio, los había en libros que leía, no sabe cómo se manejan en la vida real. Es tan triste, que seguramente son aburridos a diferencia de esas historias.

Suena a una situación que Seonghwa debería manejar el. Hongjoong levanta un dedo y va a una pared, encendiendo una pantalla que ni siquiera de nota que está ahí. En ella se muestran varios rostros. Algunos conocidos, otros no.

—Estas personas son las más afectadas por lo que pasó. Todas están tan mal, que no hablan, no sonríen y por sobre todo, no hablan de lo que sucedió —Hongjoong señala con ambas manos la pantalla. Yeosang se sienta en el sofá que hay delante—. Lo que quiero que hagas es simple: hazlos felices.

— ¿Uh?

—El problema más grande ¿Notas cuál es?

—No. Perdón. No sé. Ya ni siquiera recuerdo cuáles eran los problemas. —admite con una mano en la cabeza y una sonrisa torpe. Hongjoong ríe ligero y se va a sentar con Yeosang.

—Estas personas no saben lo que es vivir. No saben lo que es dejar fluir el dolor para que no sea tan fuerte—explica lento y suave para que no se despide. Yeosang asiente—. Has logrado en tres días que Wooyoung sonría y si tan solo te haces amigo de estas personas, estoy seguro de que podrás lograr esto.

—No lo sé. No creo poderlo. Aunque si me gusta conocer beastman.

—Con eso cuento.

— ¿Y qué va a pasar después?

—Si confiesan y ayudan, Jonghwaje podría ser desmantelado, todos quienes están dentro de sus edificaciones serían libres y... Tal vez podrías volver con tu familia. No lo prometo, pero es lo más probable.

Yeosang sube el labio inferior y mira la lista de nuevo. Entre ellos está Wooyoung, también Mingi -el murciélago del que Seonghwa hablo esta mañana-, algunos que no tiene ni idea y finalmente, se le hace extraño que Jongho esté ahí. No es una foto tan buena, nu siquiera tiene su nombre real. Solo pone Grizzly, su especie y que está en paradero desconocido.

— ¿Que le harían a Jongho?

— ¿Quien? —balbucea extrañado. Yeosang lo señala—, espera ¿Lo conoces? ¿Ese es su nombre?

—Le prometí no decir nada. Así que no te puedo decir nada—Hongjoong levanta las manos, asegurando que eso está bien—, pero ¿Qué harías con él?

—Necesito el collar que le ponen a los beastman cómo él. Sacar la información y también tener su versión de los hechos—responde directo y Yeosang asiente suave—. Se que no tiene a nadie, estaría aquí hasta que se sienta seguro o el caso termine bien.

—Es decir, lo cuidarían.

—No hay otra razón por la que lo esté buscando. —asegura Hongjoong y Yeosang celebra interiormente ¡Sabía que aquí son buenas personas!

Solo debe convencer a Jongho de que venga hasta acá. Eso va a ser difícil... También le falta el collar, por lo que complicaría todo este plan que tiene Hongjoong.

— ¿Si me ayudaras? —pregunta Hongjoong. Yeosang juega con una de las plumas de sus alas rizadas y los mechones de cabello ondulados, cayendo por su cara—. Seonghwa sabe de esto, por cierto. Puedes hablar con él sobre los beastman de la lista—anuncia y Yeosang asiente, eso es un alivio, pensó que esto era un secreto y ¡Ya tiene un secreto! No podría con dos—. ¿Si ayudarás?

—Solo sí cuando Jongho venga lo vas a ayudar.

—Bien. Te prometo que es así.

Yeosang estira el meñique y Hongjoong entrelaza el suyo, sonriendo animado. No pensó que iba a tener que firmar un pacto de esta manera.

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Jongho sube y baja su meñique, recordando a Yeosang y pensando ¿Así se hacen las promesas? Nadie se lo había enseñado. Aunque al mismo tiempo ¿Por qué seria sorprendente? Apenas me enseñó a hablar, piensa para sí mismo y se acurruca en el fondo del agujero más profundo, escuchó un ruido afuera.

— ¡Jooooonghie! —Jongho estira el cuello y entrecierra los ojos, notando a Yeosang en la entrada de la cueva—. ¡Oh! El agujero es más grande. Quizá ahora si quepan mis alas.

—NONO-

Yeosang le cae encima y quedan apretados en la profundidad del agujero. Yeosang le sonríe y Jongho enrojece, viéndolo fijamente.

—Traje comida. —anuncia con el saco abrazado hacia su pecho.

. . .

—Es un pequeño agujero en el jardín oeste—anuncia Yongsun, otra de las secretarias de Hongjoong. Él asiente con la cabeza—. ¿Tomamos alguna acción?

—Sí. Tengo una en mente.

Dangerous Thing || JongSangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora