Un latido

Capítulo 7: Solo por esta noche

Samantha Montier Dalton

Casi me ahogo con el agua cuando la vi parada al lado del profesor. Me costó un buen rato tranquilizarme, su mirada es tan intensa, incluso con sus malditas gafas puestas.

¿Qué hace aquí? ¿Cómo es que está de día en este lugar? No se supone que los vampiros duerman en sus ataúdes durante el día. Definitivamente, la manada tiene un conocimiento limitado sobre la forma en que estos chupasangres viven. No se supone que los han estudiado por años. maldita loca seguro viene a matarme y casi lo logra con semejante susto que me ha metido

Una vez que me he recuperado del susto, la observo. Se ve hermosa. ¡Dios! ¿Qué estoy pensando? Seguro tiene esos poderes que te hacen verla hermosa a pesar de ser un demonio, así como Eduard Cullon en esa película mamona que Paola me hiso ver. Su sonrisa no se borra, esa maldita sonrisa perfecta, como rayos puede tener los dientes tan lindos blancos y perfectos. Se ha sentado dos pupitres detrás de mí, y siento su mirada en mi nuca. Su presencia es muy fuerte, tanto así que siento que se me hiela la espina dorsal, es como si sintiera su respiración justo en mi oído. Estoy muy atenta, aunque sin darme vuelta estoy muy atenta a lo que sucede detrás de mí, sé que todos la miran y babean por ella.

Todos los tontos de mis compañeros han intentado saludarla y no dejan de mirarla. ¡Qué estúpidos! Si supieran que ella los ve como su próxima comida. Aunque estoy segura de que más de uno moriría feliz siendo su cena.

Luis, el más insoportable de la clase, incluso se atreve a acerca a ella, y la muy sinvergüenza está siendo amable y coqueta. Yo ni siquiera intento darme vuelta, y agradezco que Paola esté ocupada con las tareas y no caiga en sus encantos.

¡Esto me pasa por pensar muy rápido!

Paola, ¡por qué tienes que ser tan sociable! Aquí me encuentro, sentada frente a ella en el comedor, viendo cómo se sirve el espagueti como si fuera el plato más delicioso del mundo, ¿que no se supone que los vampiros no comen estas delicias? No lo entiendo, de verdad no entiendo nada. ¿Ahora porque estoy frente a ella? pff al terminar la clase de la mañana, Paola la saludó y entabló una conversación muy amistosa con ella, recordando que ayer nos topamos en el baño, y luego vinimos al comedor todas juntas. La muy estúpida les dijo a todas que yo le había elogiado el color de ojos ayer. Maldita estúpida, ¿Quién se cree?, ¿la mujer más linda del mundo o qué? aunque no puedo negar que es cierto que los ojos los tiene hermosos, eso no lo puedo negar.

Estamos en la última clase y estoy atenta a cualquier cosa que tenga planeado hacer. Nos asignan un trabajo libre, y ella lo termina muy rápido y pide permiso para ir al baño, así que hago lo mismo. La sigo hasta el baño y la acorralo. Después de lanzarle todas las preguntas que tenía en mi cabeza y de soportar sus burlas, la acorralo aún más y entre palabras llegamos al punto de hacer contacto visual, esta vez sin sus lentes. Y es justo en ese momento cuando noto que algo le afecta, un latido o algo similar, como si algo se agitara dentro de ella, y estoy segura de que también lo sintió, porque su expresión cambió drásticamente, paso de estar segura y confiada a desconcertada al igual que yo.

¿Los vampiros no tiene corazón verdad? O eso es lo que tengo entendido, pero si lo pienso talvez el sonido fue del mio

No pude investigar más, ya que en ese momento entraron otras chicas al baño, y tuvimos que disimular lo que pasaba entre nosotras. Después de eso, ella aprovecho de salir, podría jurar de rodillas que salió huyendo de mí, y al final de la clase, simplemente desapareció... ósea que huyo la pregunta es ¿huyo de mí? O ¿de lo que escuchamos o talvez sintió?

Aquí me encuentro en mi apartamento, hecha un desastre, escuchando algunas canciones que Paola me recomendó. En este momento suena Bonnie Tyler con su canción "Total Eclipse of the Heart," y pienso en todos los eventos del día, especialmente en cómo estaba vestida. ¿Tendrá algún asesor de moda para lucir tan atractiva? O, Samantha, deja de perder el tiempo divagando, me regaño mentalmente.