san valentín

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—¿Taesan-ah?

El chico de cabellos negros se levanta rápidamente del suelo y limpia las pequeñas escarchas de nieve que manchan su pantalón antes de girar en su dirección. El gato maulla, buscando nuevamente su atención.

—Hola, Jaehyun-ssi —Taesan saluda con una sonrisa pequeña, casi tímida. Revestido entre tantos colores claros lo hace lucir completamente angelical.

—¿Tú eres “T”? —La pregunta brota de su garganta, alzando sus cejas completamente sorprendido cuando el menor asiente.

—Si.

Jaehyun no sabe qué decir, y tampoco puede describir lo que siente, se mantiene callado mientras intenta asimilar la situación. Verdaderamente, no se lo esperaba. Por su mente no cruzó en ningún segundo la idea de que el considerado chico que le regalaba flores de papel sería el mismo que hace revolotear mariposas en su estómago y acelera su pobre corazón con tan sólo una pequeña acción. Estuvo tan preocupado de no herir a “T” cuando le dijese que estaba enamorado de otra persona que, ahora que sólo es Taesan, se siente aliviado.

Taesan presiona sus labios en una delgada línea ante la falta de respuesta por parte del mayor, nervioso entrelaza sus dedos en las correas de su mochila.

—¿Te decepciona que sea yo? —Pregunta.

Jaehyun sale repentinamente de su trance y se encuentra con una mirada insegura en esos preciosos ojos negros. Toma suavemente sus manos.

—No —Una sonrisa tenue se forma en su rostro, de esas que le pertenecen únicamente al menor y que siempre le ha regalado para intentar expresar todo lo que siente por él, esa por la que Taesan cae aún más enamorado.

La brisa fresca que circula por las calles acaricia ligeramente sus rostro. El cielo anteriormente claro empieza a mancharse de tonalidades amarillas y naranjas, anunciando la pronta llegada del atardecer.

—Es sólo que... —Inmediatamente, su sonrisa desaparece y un puchero la reemplaza, preocupando a Taesan. Se separa del contrario y con algo de tristeza recuesta su espalda por el pilar de los portones—. En realidad, quería pedirte una cita —Suelta, ocasionando que las mejillas del menor se enciendan.

Jaehyun se mueve un poco, sacándose la mochila y rebuscando en su interior Taesan nota el ramo de rosas dentro de ésta y aparta la mirada, avergonzado hasta sacar un par de papeles con palabras en ellas.

—Supuse que ibas a estar en el taller de composición, había planeado decírtelo ahí y entregarte algo que hice pensando en ti —Frota su nuca mientras le entrega tímidamente las hojas.

Taesan recibe las hojas que el mayor le extiende.

—Estuve en la enfermería, los nervios que tenía hicieron que me doliera mucho el estómago —Explica apenado.

En la parte superior de la primera hoja, un título escrito en una tipografía encantadora y adorando con pequeños dibujos garabateados a su alrededor. Serenade. Sus iris siguen atentamente las letras que conforman la canción, sintiendo una sensación que no puede explicar, pero que se siente demasiado para su joven corazón. Jaehyun lo observa de a ratos, disfrutando de cada expresión que se presenta en el rostro del pelinegro.

Cuando termina de leerlo, lleva su mirada hasta el mayor. Una sonrisa se extiende en sus labios porque lo está haciendo demasiado feliz; no se encuentra decepcionado ni ha rechazado sus sentimientos, sino que preparó un regalo único para él y lo está invitando a salir. Está demasiado contento ahora mismo.

Jaehyun lo toma de la mano, toqueteándolo nervioso.

—Entonces, ¿es un sí?

—Sí, hyung.

El mayor lo tira sorpresivamente hacia él, presionando sus labios con los gruesos del menor. Sus manos se deslizan por la estrecha cintura ajena mientras que las del menor toman lugar cuidadosamente en sus hombros. Ambos sintiéndose inmensamente felices.



















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¡Feliz día de San Valentín! Espero que estén teniendo un lindo día.

De verdad fue muy lindo escribir esta historia, estaba un poco asustada de no llegar para la fecha pero sí pude. Sólo deseo que les guste, nos vemos luego. ♡

Paper flowers ━━ DDINGDONGZ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora