SIEMPRE TÚ

Plan

<<<Seúl, Corea del sur>>>

-¡Estoy en casa! -gritó Dallas quitándose los zapatos, como siempre no obtuvo respuesta- Todo sigue igual. -murmuró arrojando la mochila sin cuidado en el armario de la entrada antes de atravesar el recibidor para ir hasta las escaleras.

-Buenas noches. -escuchó a su espalda.

-Papá, pensé que no estabas. -comentó girando- Buenas noches. -saludó haciendo una reverencia de noventa grados.

-Tengo una cena de negocios, pero estaba esperándote, por cierto ¿Cuándo vas a dejar de gritar cada vez que entras a casa? -le preguntó sonriendo.

-Cuando me muera. -respondió sonriendo, pasando su brazo por los hombros de su papá.

-No digas eso. -le pidió.

-Está bien, Está bien, dime ¿para qué me esperabas? -quiso saber.

-Llego esto para ti. -se detuvo para sacar de su saco un sobre.

-¡¿Es lo que creo que es?! -exclamó emocionado.

-Parece que sí. -dijo sonriendo su padre.

-¿Qué es lo que dice? -cuestionó nervioso.

-No abrí el sobre, debes hacerlo tú. -dijo sonriendo.

-¿Qué hago si no me aceptaron? -inquirió preocupado.

-Estoy seguro de que te aceptaron. -habló con confianza su papá.

-Estás seguro porque lo viste ¿Verdad?

-No hijo, no lo he visto, tienes que abrirlo tú, pero eres muy inteligente y por eso te aceptaran, en todas las universidades que hayas enviado solicitud.

-Te digo algo, pero no vayas a enojarte.

-¿Una confesión? ¿Nabi es tu novia? -inquirió sonriendo.

-No, Nabi solo es mi mejor amiga, lo que quiero decirte es que solo solicite entrar a la universidad de Columbia en Estados Unidos. -confesó mordiéndose el labio.

-¿Solo en Columbia? -inquirió y Dallas asintió- ¿Qué pasó con Harvard? -preguntó y él de nuevo negó- ¿Yale?
-No.

-¿Stanford?

-Tampoco. -volvió a morderse el labio inferior.

-Bien ¿y en Londres?

-Solo Cambridge y Oxford.

-Bueno, son cuatro buenas posibilidades. -comentó.

-¿Cuatro?

-Claro, porque supongo que también solicitaste entrar a la universidad nacional de Seúl ¿verdad? -inquirió mirándolo fijamente.

-Oh, sí también. -confirmó sonriendo, lo hizo, pero no se preparó tanto como para ingresar a Columbia- Pero sabes que quiero estudiar en New York como mamá. -le recordó.

Su madre era una americana de descendencia tailandesa que conoció su padre en uno de sus viajes de negocios, se enamoró perdidamente de ella, tanto que dejó Corea para instalarse en New York por ella, tuvieron un noviazgo corto antes de casarse y traerlo a él al mundo, eran muy felices, hasta que enfermó y murió cuando él apenas tenía doce años, después de su funeral, su papá decidió volver a Corea, trayéndolo con él, de eso ya había pasado seis años, así que su primera razón para estudiar en Columbia era volver a la ciudad que tanto amó su madre.

-Lo sé, por eso debes abrir el sobre o nunca sabremos si lo lograste. -señaló.

-Es verdad. -respiro profundo- Aquí voy. -dijo nervioso conteniendo el aliento, mientras abría el sobre con cuidado- ¡No puedo! -exclamó cerrando los ojos- Dime si no estoy dentro. -extendió el documento hacia su papá.