El primer momento de conmoción pasó tan rápido como un parpadeo y Jackie pudo observar con mayor atención al joven. Vestía con ropas hechas de pieles de animales, a sus espaldas tenía colgando una capa de la misma piel que aquella criatura que tenían delante. Por el cabello de su nuca, podía ver que era de un rubio castaño. Era más pequeño que ella. Debido a que estaba de espaldas, no podía ver más de él, pero, dada la situación, no era lo que más le llamaba la atención. Todavía había un peligro delante y no tenía del todo claro que fuesen a salir airosos de ello. De todas formas, no se iba a quedar sin hacer nada.
Dio un paso adelante.
—Quédate detrás de mí —pronunció. Su voz era la de un chico, pero era un tanto aguda. ¿Qué edad tendría?
—Quiero ayudarte.
—Si te pones delante no podré protegerte bien. Quédate ahí hasta que me encargue del wolven.
"Wolven", repitió en su cabeza. Ese debía ser el nombre de aquel animal. Este gruñía a la vez que enseñaba los dientes. La flecha aún permanecía calvada en un costado. Se veía igual de fiero que antes de recibir el disparo, pero más cauto. Era como si evaluase qué hacer.
—Oye, acércate y toma una de las flechas que tengo en mi carcaj —dijo el chico. El arco alzado, listo para tensar. Jackie hizo caso—. Bien, ahora voy a disparar. Cuando lo haga, dame la otra flecha de inmediato.
—De acuerdo.
Tal como lo dijo, el chico disparó la flecha y le dio al wolven en la joroba. Este gruñó de dolor y se encaró a ambos con la intención de responder al ataque, sin embargo, el chico ya tenía una nueva flecha preparada y tensada, listo para disparar. El wolven pareció comprender la situación y, a regañadientes, comenzó a retroceder poco a poco, hasta perderse en la espesura del bosque. Pese a ello, el chico no bajó la guardia, se mantuvo un rato prudente mirando a la nada, justo en el punto en el que el wolven había desaparecido. Solo cuando el chico bajó el arco del todo, Jackie se sintió más tranquila.
—Gracias por ayudarme.
Esperó que el chico se girara y correspondiese las gracias, pero, en vez de eso, este reaccionó dando un salto que puso distancia entre ambos. Por fin pudo ver su rostro. Se le veía de piel suave, con ojos grandes y una cara con forma redonda. Como lo supuso, era un niño.
—Quédate ahí justo donde estás —dijo el chico. Sus manos aferradas al arco y su flecha. Por el tono de su voz y la expresión seria en sus ojos azules, supo que hablaba en serio.
Jackie alzó las manos.
—Tranquilo, no voy a hacerte nada.
—¿Quién eres? —preguntó, tajante.
—¿Por qué este cambio de actitud? Sabes que no quiero hacerte nada. Antes te ayudé.
—Teníamos a un wolven hambriento delante, ayudarías a cualquiera en una situación así para salvar tu pellejo.
—Si desde un principio ibas a mostrarte tan precavido conmigo, ¿por qué me salvaste?
—No es común ver a otra persona en el bosque estos días.
Hubo silencio por unos momentos. Jackie relajó las manos y soltó un suspiro. Era la primera persona que veía en semanas, tenía que empezar con buen pie.
—Entiendo. Me llamo Jackie. ¿Tú cómo te llamas?
—Oliver —respondió al cabo de un rato—. ¿Eres un Perseguidor?
—¿Un qué?
—Uno de los hombres del rey que caza personas. ¿Eres uno de ellos?
—No. Solo soy una chica que deambulaba perdida por el bosque. Estoy buscando un lugar con gente, algún pueblo en donde pueda pedir indicaciones.

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Jarco - Un amor maldito
FanfictionDespués de que Star se fuera de la tierra, Marco queda deprimido por la inesperada y confusa partida de su amiga. Apenada por él, Jackie le ayudará a solucionar las cosas. A partir de ese momento los dos vivirán situaciones que podrán a prueba su re...