PitBabe mejor conocido como "El Rey de las Carreras" ha sido el mejor piloto durante muchas temporadas llevando el nombre de su equipo "X-Hunters" en alto.
Pero todo parece cambiar cuando UAC CORP, la empresa manejada por su padre adoptivo: Tony Che...
Babe se despertó sintiendo un fuerte dolor en la cabeza, gruñó mientras trataba de sentarse y recordar que demonios había sucedido la noche anterior.
Los recuerdos estaban borrosos en su mente, pero claramente el rostro triste de Charlie mirándole fijamente fue lo que lo hizo levantarse de golpe del sillón a pesar de sentir una punzada en su pierna herida.
— Mierda, ¿qué fue lo que te dije anoche? —murmuró mientras tomaba su teléfono y marcaba el número de su novio—.
"— ¿Aló? —le contestó una fina voz que claramente no era la de su chico—.
— ¿Quién eres y por qué tienes el teléfono de Charlie?
— Ah eres PitBabe —se escuchó al joven bostezar—. ¿Por qué llamas tan temprano? Son las seis de la mañana.
— ¿Dónde está mi novio? Pásame con él —gruñó apretando con fuerza el teléfono en su mano—.
— Está dormido —le respondió—. Le diré que llamaste, adiós...
— ¡Oye no te atrevas a colgarme!
— Kim, ¿quién es? —pudo escuchar que Charlie preguntaba a lo lejos—.
— Nadie importante —le respondió el coreano y colgó—."
Babe gritó evidentemente enojado y lanzó su teléfono contra el suelo volviéndolo trizas, caminó como pudo hasta su habitación y se cambió rápidamente para luego ir hacia su auto. No le interesaba si aún no podía manejar correctamente, pero iría en busca de Charlie a como de lugar.
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Way se despertó y analizó la habitación en la que se encontraba, notando que claramente no era la suya. Giró el rostro hacia la persona que dormía a su lado y soltó un quejido mientras analizaba las fuertes y masculinas facciones del rostro dormido de Pete, el ceo de Beyond Group y nuevo patrocinador de X-Hunters.
— Maldita sea —susurró y se levantó tratando de no hacer mucho ruido—.
Buscó su ropa que se encontraba regada por toda la habitación y se cambió velozmente para luego huir de aquella lujosa casa. En el camino a su departamento notó un auto familiar pasar por su lado y detenerse de golpe, el conductor bajó la ventana y se inclinó para hablarle.
— Sube al maldito auto Way, ahora mismo me contarás que mierda pasó anoche —Babe lo miraba realmente enojado—.
Way no protestó en ningún momento y obedeció a las palabras de su mejor amigo. En cuanto subió al auto, Babe condujo rápidamente hacia algún lugar que él realmente desconocía.
— Entonces, ¿por qué estás enojado?
— ¿Sabes dónde vive el estúpido piloto coreano de Red Racing? —lo miró de reojo—.
