Amante Real

Capitulo 7

"Batallas"

Marinette

A Adrien no parece importarle que su hermana vaya a vivir a Inglaterra.

-padre, ¿porqué tomas esta decisión tan de repente?

-Elena hija mía, necesitas seguir formandote e Inglaterra planea recibir a la princesa de Francia en su palacio.

-no quiero irme padre, no puedo irme.

-vas a ir y me aseguraré de que así sea-me alejo de la puerta antes de que terminen con su conversación-

Le he ganado esto, con ella fuera del camino podré manejar todo, excepto por Amelie quien extendió su estadía, para asegurarse de mis movimientos.

-no es que no quiera a mi hermana pero a veces no sabe de lo que habla, espero que allá reciba mejores clases.

-¿por qué no me mandaste cartas?

-¿y dejar que me descubrieran?

-es que cuando se trata de ti olvido las cosas

-puedes olvidar todo, menos lo que yo te hago.-lo beso y lo llevo detrás de mi armario donde es más fácil ocultarme-

-he escuchado todo lo que se habla en el palacio llega a oídos de la corte.

-¿vas a creer en todo lo que la gente dice?

-no, cuando sea mi momento voy a reclamarte como mi esposa, iré contra todo, contra todos, las leyes, la corte.

Sus palabras hacen que me llene de esperanza.

-pero van a poner una mujer a tu lado, alguien de la realeza.

-yo decido con quien voy a casarme-nos besamos nuevamente pero escucho la puerta abrirse y rápidamente lo llevo al piso, una criada entra-

-señorita.

-¿si, qué pasa?

-la princesa Elena desea verla.

-voy en un momento y por favor toca la puerta antes de entrar.

-lo siento, no volverá a pasar

Se retira y me doy cuenta que Adrien me acaricia las piernas, dios sabe cuanto estoy pecando.

La iglesia me castigaria por ser una curiosa y lujuriosa.

Me toma de la cintura estando de rodillas y me lleva al piso se sube sobre mi pero hay algo que siempre he querido probar, que esta prohibido para las mujeres y que nunca me habia puesto a pensar en atreverme a hacerlo.

-¿en qué piensas?

-es que... vino algo un poco loco a mi mente.

-¿de que se trata?

-bueno... he pensado en que me gustaría estar arriba de ti... sobre ti... cuando ocurra.

Me besa y me hace rodar quedando yo echada sobre su pecho.

-tu curiosidad y deseos son lo que me recuerdan que una mujer como tú, no podré encontrar.

Lo beso en esa posición y hasta que vuelven a tocar la puerta.

-lo mejor es que vaya, si no tu hermana vendrá por mi.

Me ayuda a pararme.

-tu te quedas aquí hasta que no haya nadie en el pasillo.

-voy a esperar-lo beso por última vez y salgo de mi habitación.-

...

Adrien