𝙀𝙧𝙧ø𝙧 𝘾𝙚𝙡𝙚𝙨†𝙞𝙖𝙡→Alastor←

XXIX

Hurry up—Capítulo veintinueve.

Dos días después Delilah se encontraba de nuevo en la biblioteca, por lo que tenía entendido hoy no habrían actividades donde ella fuera necesaria, no luego de demostrar que no era tan buena proponiendo actividades.

—Hoy aprenderemos a no mentir. —Delilah se cruzó de brazos aburrida ya que Charlie le pidió que diera esa clase, porque ella también formaba parte de los pilares del hotel. —Para eso tengo una gran actividad. —Aclaro luego.

—¿Y que tengo que ver yo con esto? —Pregunto Husk.

—El personal también deberá aprender si no está haciendo nada importante. —Le dió una sonrisa amplia, todos los que formaban el hotel estaban allí. —Niffty, haz tu parte. —Pidio mientras tomaba el plomero de las manos de la pequeña.

—A continuación dictare los hechos. —Niffty saco un pequeño papel para luego comenzar a leerlo con una gran sonrisa. —Ayer por la noche prepare una deliciosa tarta para Delilah en homenaje a su nuevo puesto como reina de los bichos. —Comenzó Niffty mientras Delilah caminaba como si de un militar se tratase.

—Tarta deliciosa por cierto... Aunque no saboreé toda. —Apreto el plumero en sus manos casi rompiéndolo.

Niffty asintió frenéticamente antes de regresar su mirada al papel. —Ambas subimos a su cuarto para hacer su corona de reina, para cuándo bajamos... ¡La tarta ya no estaba! —Grito Niffty frenéticamente.

—Gracias Niffty, gracias. —Le regreso el plumero a lo que la pequeña volvió a su lugar. —Ahora, las reglas son; Nadie va a salir de este campo de fuerza. —Chasqueo sus dedos y un campo color morado los cubrió a todos dejando enmedio una pequeña mesa. —Interrogare a cada uno, ninguno puede mentir.

—Que aburrido. —Susurro Angel a lo que Delilah fijo su vista en el.

—Angel será el primero. —Sonrio y atrajo a Angel quien se sentó frente a ella con la mesa enmedio, Delilah tomo su mano plasmandola en la mesa para luego abrir sus dedos dejando un pequeño espacio entre ellos. —Niffty, ¿Podrías darme el objeto para interrogar?

Todos miraron expectantes la situación, Charlie no entendía el fin de la actividad aún así prefirió no decir nada, hasta que vio como Niffty le daba una daga algo pequeña a Delilah.

—¿Dónde estuviste anoche? Aproximadamente a las 21 pm —Pregunto Delilah aplicando fuerza en la muñeca de Angel para que no la moviera.

—¿Que mierda haces, Del? —Angel miro confundida la daga en la mano derecha de la rubia.

Todos a excepción de Niffty, Alastor y Husk soltaron un grito ahogado cuando Delilah clavo la daga fuertemente en el espacio sobrante de los dedos de Angel. —No se responde una pregunta con otra, intentemos una vez más. —Delilah retiro la daga de la mesa comenzando a clavarla en la madera entre los dedos de Angel en un pequeño juego.