Atraparme, Me Estoy Cayendo (Y Nunca Me Sueltes)

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Lena le da tiempo a Kara para dormir al día siguiente y luego le envía un mensaje de texto alrededor de las diez.

Lena: ¿Qué estás haciendo hoy?

Kara: En el refugio todo el día. *cara sonriente*
Kara: ¿Quieres venir?

Lena: No quiero molestarme.

Kara: De ninguna manera.
Kara: Puedes hacerme compañía, si no te importa.
Kara: ¡Además, puedes ver a Scout! *emoji de ojos de corazón*

Lena se da cuenta de que nunca podría decir que no a pasar tiempo con Kara, y es por eso que se encuentra en el Super Shelter de National City un domingo al mediodía, sosteniendo tres cajas de pizza.

Kara había insistido en que usara algo informal, por lo que optó por su par de jeans más cómodos, una camiseta verde holgada, el único par de tenis que posee y se recogió el cabello en una coleta alta. Es agradable tener su cabello largo recogido en algo que no sea un moño restrictivo y contempla usarlo un poco más a menudo, incluso en la oficina.

Kara corre hacia la puerta principal cuando llega y la abre, deslizando manualmente una puerta para dejarla entrar, luego cerrándola y bloqueándola una vez más. "Dios mío, trajiste pizza".

"Marco."

"Ay dios mío ."

Lena se ríe. "Espero que tengas placas. Me acabo de dar cuenta de que no recogí nada".

"Sí, tenemos platos de papel en mi oficina. Me estaba entrando hambre para almorzar, así que tienes el momento perfecto".

Lena tiene la clara impresión de que Kara rara vez tiene a alguien en su oficina. O, al menos, no parece entretener a muchos humanos . El espacio está claramente diseñado pensando en la comodidad canina, con no menos de tres camas para perros en el suelo y una pila de juguetes en un estante de la pequeña estantería (los otros estantes están repletos de libros sobre psicología y lo que Lena supone que son libros para perros; los títulos hacen que sea fácil de distinguir para algunos e imposible para otros) y dos frascos de golosinas en la esquina de su escritorio.

Hay una silla de ruedas metida debajo del escritorio y un pequeño sofá de dos plazas contra la pared adyacente, y esos son los únicos asientos disponibles para humanos. El sofá de dos plazas está intercalado entre la estantería y una gran perrera de alambre. La pared del fondo está cubierta con varias esteras que cuelgan de ganchos; Lena entrecierra los ojos y piensa que probablemente sean las esteras de alimentación como en la que vio al Golden Retriever olfatear.

El área frente al sofá de dos plazas está ocupada por numerosos juguetes para perros, pero todos parecen haber sido elaborados con pedazos de productos reciclables, incluidas botellas vacías de dos litros, rollos de papel higiénico y toallas andrajosas.

Kara saca dos platos de papel de un cajón de su escritorio y arrastra su silla cerca del sofá de dos plazas para que sirva de mesa para las cajas de pizza. Se sienta a un lado del sofá de dos plazas cubierto con una manta y anima a Lena a unirse a ella.

Charlan fácilmente durante el almuerzo, discuten intereses musicales compartidos (Lena se sonroja ligeramente cuando admite que su placer culpable es 'NSync pero Kara chilla y comienza a recitar letras) y libros favoritos (además de los libros para sus respectivas profesiones, Lena prefiere la literatura histórica mientras que Kara disfruta de la ficción). con finales felices) y luego Lena pregunta si Kara siempre ha traído a casa mascotas callejeras.

"No precisamente." Juguetea con sus gafas y las coloca varias veces. "Me adoptaron cuando tenía trece años después de que mis padres murieran en un incendio".