Otro pasado, otro futuro (Itanaru)

Capítulo 18

El equipo siete caminaba con Naruto a su lado- qué hace él aquí?, ¿por qué nos acompaña?- Obito preguntó con molestia, Minato suspiró con fastidio -Obito, no empieces, Naruto es un shinobi de élite, está bastante capacitado para ir con nosotros -el Uchiha apretó el ceño al recordar lo que escuchó del chico en la aldea, Rin lo veía cabreada, no podía perder la compostura frente a su equipo o perdería su imágen tierna ante Kakashi y su sensei- muéstrame tu rasengan -Naruto sonrió al ver que su padre lo apoyaba y le daba su autorización para usarlo, levantó su mano- te vas a sorprender desde ahora te digo-

Minato sonrió con diversión, kakashi se puso del otro lado de Naruto observando cómo el rasengan aparecía -¿cómo demonios lograste hacerlo?, me costó un año conseguirlo -el rubio menor sonrió arrogante -por Kami, un año?, duré dos semanas sensei chiquito -Minato y kakashi abrieron sus ojos sintiendo que salían de sus cuencas- mientes!, no puede ser, usas los clones!-

Naruto negó con diversión -no fue así sensei chiquito súper envidioso- Obito apretaba el ceño con celos, ese bastardo se hacía más poderoso, Rin veía la atención que el chico recibía, antes era de su kakashi -entonces cómo lo hiciste?- Minato preguntó con duda, Naruto sonrió arrogante- día y noche sin parar, dormía una que otra hora, no me iba a dejar vencer por la técnica, mis manos ardían, podía ver sangre y llagas en ellas, dolía una mierda -lo vieron con seriedad, no mentía -una vieja rubia de bubis enormes me retó en una apuesta -Minato tenía una gota en la nuca al ubicar de quién hablaba, kakashi no entendió -dijo que si le ganaba me regalaría este collar- el rubio mayor abrió bastante los ojos al darse cuenta qué collar era- por Kami, sabes cuánto vale ese collar y a quién perteneció?-

Naruto suspiró con tristeza, asintió- ya no tiene el mismo valor, se reventó en miles de pedazos, usé muchos clones para recuperar lo que pudiéramos, traté de reconstruirlo lo mejor que pude con mi chakra- Minato afiló su mirada, concentrar chakra hasta hacerlo duro como un diamante era extremadamente difícil, su hijo era poderoso, estaba seguro que ni siquiera sabía que tanto lo era, sonrió con orgullo, debió amar bastante a la rubia y a su sensei para lograr todo lo que había hecho- al final triunfé, este collar significa mucho para mí, una promesa de nunca rendirme y dar lo mejor de mí- habló bajito, pero audible para el equipo, Obito parpadeó, era algo similar a lo que él a diario se repetía, mientras caminaba analizaba al chico viéndolo de distinta manera, con otra luz.