Si a Hongjoong le hubieran dicho que cuidar de un bebé como lo era su pequeño wooyoung era facil. Perfectamente se estaria riendo en su cara.
Su pequeña masa de grasa, era el dolor de cabeza de ambos padres primerizos. Ahora, como seria cuidar a un...
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¿Cuanto tiempo había trascurrido?
Ambos tenian claro los días, los meses e incluso las horas que habían pasado desde la primera pelea. El día que se habían enterado de todo el problema había sido a finales de Junio, casi rozando los primeros días de Julio, el sexo de su pequeño estorbo había sido descubierto a finales de Agosto y basicamente en esos momentos estaban ya a finales de Octubre.
La famosa fecha de Halloween, donde muchos salian a disfrutar de fiestas, los mocosos ocupaban las calles como si fuera un patio de recreo gigante, algo que les desagradaba a ambos adultos que solian apagar las luces y acurrucarse en su cuarto para que no les molestaran esa noche, ignorando los toques en su puerta o las risas infantiles.
En esta ocasión a pesar de que tenian los mismos planes para continuar con su rutina, tuvieron que hacer un cambio radical debido a ciertos problemas que había comenzado tener Seongwha durante los ultimos días, basicamente desde el 23 había tenido dolores en las zonas de su pelvis. Eran constantes y pasaba mayormente sentado en el sofá soltando quejidos o simplemente pasando su mano por las zonas más adoloridas.
Hongjoong realmente había comenzado a tener una preocupacion por la salud de su esposo e incluso había sugerido de que fueran al hospital con la famosa Doctora para que le revisara y dieran algo para el dolor, pero su esposo era más terco que una mula y apenas había mencionado las palabras, "Hospital" y "Doctora", se había negado, alegando que solo eran calambres que pasarian con unos días de descanso.
Claramente eso no sucedio y de hecho había empeorado hasta al punto de que no tocaba ni si quiera los platos de comida, el dolor que el más alto tenia era extraño, le daba ganas de gritar durante los minutos que comenzaba, pero cuando comenzaba a disminuir era más que nada unos cosquilleos leves que molestaban, más no dolian.
En esos momentos ya estaban en al ultimo día de octubre, las calles estaban llenas de niños y familias, mientras que ambos esta vez no habían apagado las luces de su casa y tampoco estaban encerrados en su cuarto, de hecho, estaban en la sala, con seongwha sosteniendo su hinchado abdomen mientras se quejaba en voz alta y Hongjoong no podia hacer más que acariciar su rodilla mientras esperaba pacientemente a que algúno de sus amigos se dignara a contestar la llamada de emergencia.
Por milagro, Jongho había atendido a su llamada con una voz energetica, con algunos pequeños gritos de fondo que le generaron algo de incomodidad durante unos segundos, igualmente no se mantuvo mucho en silencio cuando su esposo volvio a quejarse, juntando sus rodillas en busqueda de un poco más de tranquilidad.
—Jongho, necesito algo de orientacion urgente por aquí— Su voz sonó más tranquila de lo que esperaba, aguantando el grito que quería dar cuando su pareja había puesto su mano sobre sus cabellos, tironeandole de lado a lado para que se apurara en dar la informacion y no dijera cosas que no estaban en el caso.
—¿Sucedio algo?—
—Seongwha lleva por lo menos más de una semana con dolores en el abdomen y pelvis, tampoco a querido comer por la misma razón, pero este idiota no quiere que lo lleve a urgencias para que le den un puto medicamento para el dolor— Expreso su queja rapidamente, mirando de forma seria a su esposo que no dudo en devolverle la mirada.
