triángulo amoroso •°•Mattheo.R-Draco.M•°• (en proceso)

chapter twenty-six

Luego de haberle contado todo a detalles a mi mejor amigo, se quedo pensando unos segundos, buscando una palabra indicada.

-Lia, Draco es mi mejor amigo -Comenzo a decir- Pero tu eres como mi hermanita, y... Alguien que te hace sentir insegura no te ama. El amor te tiene que hacer sentir vivo no acomplejada.

Sabía que él tenía razón, pero yo quería a Draco como nunca había querido a alguien. Con él dejaba todos mis principios atrás, aunque después me toque aprender de ellos, me negaba a perderlo. Y si, dependía emocionalmente de Draco, aunque no lo queria admitir.

-Ya lo se, pero lo amo -Me excuse.

-Él también te ama, Lia -Paso su brazo por mis hombros y hizo que apoyara me cabeza en su hombro- Pero conozco a Draco, y él esta comenzando a amar a alguien más.

No dije nada más, pero esa frase había quedado resonando en mi mente todo el día. Theo no lo dijo con mala intención, él solo quería lo mejor para mí, y lo sabía. Él era mi mejor amigo y nunca me iba a mentir y eso dolía.

La sinceridad en sus palabras dolía.

Pero ahora no podía pensar en eso, el armario ya estaba listo y eso solo significaba una cosa, la muerte de Dumbledore, o la mía.

Estaba sentada en el sillón mirando a la nada y pensando en lo difícil que sería matar a alguien. Nunca lo había hecho, se supone que una chica de 16 años ni siquiera tenía que pensar en esas cosas. Pero eso era en el mundo muggle, acá todo era diferente.

Solo quería ser uno de ellos, ser un muggle sin magia, ser normal y no pensar que hay otro lugar del mundo, no tan lejano, siendo dominado por alguien que solo quiere su bien.

Escuché la puerta de la sala de menesteres abrirse y pasos apresurados acercarse a mí.

-Emilia, tenemos que irnos.

Mire a la persona parada al lado de mí. Mattheo me miraba impaciente.

-No estoy lista -Susurre.

-Por favor Emilia, después va a ser peor -Al ver que no me movía continuo- Draco ya esta en la torre.

Mi vista automáticamente se dirigió a él. Me pare rápido y comencé a caminar hacía las torres altas del castillo. No giré nunca a ver a Mattheo, pero sentía sus pasos apresurados detrás de mi.

Subiendo las escaleras de la torre de astronomía pude ver una figura por las aberturas del suelo de madera. Me quedé confundida pero no mire más para no generar sospechas, ya sabía de quien se trataba sin siquiera verlo.

Una vez llegue arriba Dumbledore se hallaba allí, con Draco a un lado hablando de un tema que no llegue a oír. Me giré y me acerqué a Mattheo.

-Potter esta debajo -Le susurré en su oído- Debes encargarte de que no ande de chismoso.

No dijo nada y simplemente se fue. Observe el rostro neutro de Dumbledore que intentaba mantener la calma. Me daba pena hacer esto, y no porque el director me cayera bien, pena al saber que eran sus últimos momentos de vida, y él lo sabía y sin embargo estaba tan tranquilo. No entendía porque estaba tan sereno sabiendo que iba a morir, yo odiaba la muerte, le tenía miedo ¿Por qué él no?

Me puse firme y lo apunté con mí varita. La respiración agitada de Draco al lado mio no me dejaban concentrar en mi objetivo.

-Emilia yo lo hago -Me dijo el rubio entre lágrimas.

Pero no podía, él no era tan valiente, el no era tan fuerte para afrontar algo así. Y quizás yo tampoco lo era, pero a mí no me temblaba en pulso.

-Emilia, no es necesario -Esta vez fue Dumbledore el que hablo- Puedo ayudarte.

-No quiero su ayuda -Le respondí lo más tranquila que pude, no quería parecer nerviosa.

De pronto un montón de mortifagos aparecieron en la torre y nuevamente sentí la presencia de Mattheo al lado mio. A diferencia de Draco,él me brindaba seguridad, y odiaba eso.

-Emilia, hazlo -Me apuro, Bellatrix Lestrange, sedienta de sangre. Sedienta de muerte.

La mire de reojo pero no hice nada ¿Cómo lo hacía? ¿Merlín iba a perdonarme después de esto? Había hecho muchas cosas malas durante mi vida, y no era perfecta, había pecado muchas veces, pero la idea de matar alguien de manera literal nunca se cruzo por mi mente.

Sentí a Mattheo colocarse justo detras de mí. Su respiración abanicaba mi nuca y su labios rozaban mí oreja. Pero eso no me desconcentró ni un segundo de mi objetivo.

-Ahora cariño -Dijo dominante en un susurro casi inaudible.

Y detrás de esas palabras las mías salieron también, intentando contener todo sentimiento que me gritaba que no lo haga. Callando esas voces que me decían que me vaya de ahí. Voces que me hacían querer huir.

-Avada kedavra -Musite.

Y así, el cuerpo inerte de Dumbledore cayó de espaldas al vacío, dejando su vida atrás, junto con mis posibilidades de elegir otro camino. Ya estaba hecho, había sido tan fácil y duro a la vez.

Todo estaba en silencio, el mundo no giraba y todo a mi alrededor se había detenido. Inmóvil trataba de convencerme de que había hecho lo correcto, de que todo estaría bien.

La mano de Mattheo hizo presión en mi muñeca sacándome de mi trance y devolviendome a la realidad.

-Tenemos que irnos -Casi no había escuchado su voz por todo el griterío a mi alrededor.

Me gire desesperada en busca de Draco, mire a mis alrededores hasta que choque con su cabellera rubia.

-Draco tenemos que irnos -Le grité para que me escuchara.

-No puedo, tengo que volver por Astoria, ella está en peligro.

Mattheo no dejo que diga nada porque automáticamente nos teletransporto a la mansión Malfoy. No había nadie excepto Narcisa moviéndose inquieta por la sala. Al verme se acerco desesperada.

-¿Y Draco? ¿Dónde esta? ¿Esta bien? -Me pregunto sin dejarme dar una respuesta entre cada pregunta.

-Narcisa él esta bien, fue a defender a Astoria -Le respondió Mattheo sin dejarme hacerlo.

Yo no tenía fuerzas para ser la que le de la respuesta, todavía seguía shockeada. Narcisa, automáticamente miro mi rostro neutro, cuando Mattheo pronunció el nombre de la otra chica. Pero no dije nada, simplemente me acerqué a sentarme en un sillón de ahí, esperando que todo termine.

No iba a negar que mi corazón se habia roto al ver al amor de mi vida preocupado por alguien más. La idea de no ser el amor de la vida de Draco, era cada vez más cercana. Una idea que en algún momento no existió y ahora estaba cada vez más presente por mi cabeza.

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Hello!!
New cap.
Voten y comenten, los amoo.

[Corregido]