Pequeños actos de bondad

Capítulo 59 : Deshacerse de los juguetes.

Yamada les sonrió cuando sonó el timbre y salió de la clase, llegando Ectoplasm unos minutos más tarde. Izuku se tragó los nervios al ver al maestro. Casi sin darse cuenta, comenzó a masticar el collar que Yamada les había dado mientras sus manos jugaban con uno de los dispositivos inquietos.

Mantuvo la cabeza gacha, pero vio la forma en que la maestra parecía agitarse cada vez más a medida que avanzaba la clase. Vio los ojos entrecerrados que le estaba enviando Ectoplasma. Notó que su clase también parecía volverse cada vez más inestable.

Se sentía como si todo estuviera tambaleándose, el equilibrio cambiando.

La clase de matemáticas se había vuelto cada vez más tensa, no solo para Izuku, sino para todos a medida que Ectoplasm se volvía cada vez más brusco con sus respuestas. "¿Me puedes explicar esto?" Kaminari le susurró a Ashido.

La chica de cabello rosado se encogió de hombros.

"Maldito niño, realmente debes haberte frito el cerebro si no entiendes esta simple ecuación", comentó Ectoplasm.

Jirou resopló un poco ante eso, sonriéndole a Kaminari que se había hundido en su asiento.

Sin embargo, Iida y Yaoyorozu fruncieron el ceño mientras miraba a sus compañeros de clase. Izuku mordió un poco más fuerte, confundido en cuanto a por qué Ectoplasm parecía enojado con toda la clase. ¿No debería el profesor estar enojado sólo con él?

A Izuku no le gustó ver cómo la maestra trataba a Kaminari. Tal vez... tal vez necesitaba decírselo a Aizawa y Yamada, no por su propio bien, sino por el de sus compañeros de clase. No merecían ser lastimados solo porque se vieron obligados a tener al inútil Deku como compañero de clase.

Los minutos parecieron pasar lentamente, e Izuku no pudo evitar moverse y juguetear con el dispositivo en sus manos.

"Midoriya, ¿podrías detener tu movimiento innecesario? Estás distrayendo a tus compañeros de clase", espetó Ectoplasma, e Izuku se encorvó sobre sí mismo, con recuerdos destellando en sus ojos.

Se suponía que la UA sería diferente.

Intentó quedarse quieto, pero le resultó difícil sentir que la profesora lo miraba fijamente. Los minutos seguían pasando.

"Levántate Midoriya", dijo Ectoplasm.

Izuku miró hacia arriba y, al ver los ojos entrecerrados, tragó, pero se levantó, incapaz de evitar la forma en que temblaba. "Tira tu juguete, te sigue distrayendo", dijo la maestra, señalando el bote de basura.

Los ojos de Izuku se abrieron, "P-pero-"

"¿Me estás respondiendo?"

Izuku sacudió frenéticamente la cabeza, cerrando los ojos con fuerza mientras sentía que le ardían. Dejó caer el dispositivo inquieto en el bote de basura, negándose a mirar, incluso cuando sintió que algo se estaba rompiendo.

Aizawa les había dado los dispositivos, confiaba en ellos y Ectoplasm había hecho que Izuku los tirara.

"El collar también", dijo Ectoplasm, con un toque de... algo... en su voz.

Sus ojos se abrieron de golpe mientras miraba fijamente a la maestra, congelado. "No tenemos todo el día", dijo Ectoplasm.

A lo lejos podía escuchar ruidos de sus compañeros de clase, y pensó que tal vez estaban protestando, pero todo parecía muy lejano cuando se sacó el collar por la cabeza y lo arrojó a la basura.

Sintió las lágrimas, ardiendo mientras rodaban por sus mejillas. "Deja de ser un llorón y vuelve a tu asiento".

Izuku lo hizo, mirando hacia el escritorio con una sensación de entumecimiento.