Golden like us ⁓ KookJin (Jeon JungKook y Kim SeokJin) (Omegaverse)

Capítulo 8~Primer encuentro

Era el tercer grito ensordecedor de la mañana, la cuarta vez que alguien dejaba caer un libro al suelo con desinterés y la décima persona que se atrevía a entrar a su tienda con esas intenciones.

-Por favor, señorita, debe... -Su frase hecha y educada fue interrumpida por el caer de miles de cosas sobre su máquina registradora y ordenador.

Desde que la semana pasada, JungKook, había sido dado de alta y el rostro de SeokJin circulado por todo Internet, la cantidad de clientes a su librería había ido en aumento. Sin embargo, el fenómeno fan, terminó siendo el desastre que era ahora.

SeokJin, que siempre había adorado su tranquilidad y estar a un lado, ahora tenía constantemente a algún paparazzi esperando en su puerta a que su marido decidiera pasar por allí. Incluso, algunas veces que hablaba con clientes recurrentes, le había hecho fotos a él desde el otro lado de la cristalera.

Bueno, esos eran los menos molestos sinceramente, eran peor las fans. Aquellas que se paseaban una y otra y otra vez por su puerta y se sentaban en el mismo suelo de la calle a esperar. Pero, malditos sean los que se consideraban fans y en realidad eran obsesivos.

Aquel grupo era el menor, pero cada vez que uno de ellos iba, le rompía la moral. Gritos de solo verlo, como si él también fuera una celebridad, no siendo así. Queriendo tomarse fotos con él, pidiendo autógrafos...

Esas eran los amantes de su relación con JungKook y después estaba el otro extremo. Como la Omega que ahora mismo estaba frente a él dándole peluches, fotos, pulseras, cartas y demás para su marido.

-Tú no lo mereces, pero quiero que le des todo esto. -SeokJin parpadeó varias veces seguidas y sonrió de lado.

-No voy a darle nada a nadie, haz el favor de recoger tus cosas y salir se mi librería. -La chica, con el cabello teñido de un rojo brillante, arrugó su nariz y alzó la barbilla dispuesta a discutir. -Antes de que digas ninguna tontería más, déjame informarte de que estás siendo grabada por mis cámaras de seguridad y que estoy en mi total derecho de admisión al prohibirte la entrada. Gracias y adiós.

-¡JungKook se cansará de ti! ¡No eres más que un Omega cualquiera y viejo! ¡Ojalá se queme tu asquerosa librería!

El portazo que dio al salir sacudió todas las estanterías, con un nudo en la garganta, SeokJin se acercó hacia los ventanales para bajar las cortinas. Los paparazzis le hacían fotos a su rostro decaído, las fans tranquilas le miraban con pena, pero nadie se fue y le dejó solo aún si cerró su tienda tres horas antes de lo establecido.