🐎EL TESTARUDO SR. PARK🐎

7. Cómo te ansía cada espacio de mi cuerpo

Baekhyun les avisó a su hermano y amigo que Kyungsoo pronto vendría a recogerlo y ellos abordaron el autobús un poco más tranquilos haciéndolo prometer que les avisaría tan pronto como llegara a la hacienda.

Para cuando recibió la llamada de Kyungsoo informándole que no podría ir, el miedo se apoderó de él, ya eran las nueve de la noche, ya ni siquiera había autos en la plaza esperando algún viaje. No sabía qué hacer, Kyungsoo le dijo que buscara un hotel para pasar la noche y que en la mañana lo recogería muy temprano, a escondidas de Chanyeol si era necesario. Baekhyun quedó nuevamente perdido, no entendía a ese hombre, había sido tan amable en la mañana y ahora no le importaba dejarlo dormir en la calle.

Él tenía tantas cosas encima que ni siquiera podía cargar con todo y se había acomodado en una banca del parque porque Kyungsoo dijo que allí lo recogería. Baekhyun quiso llorar en ese momento por el enojo y la frustración. Esto no era lo peor que le había tocado afrontar, claro que no, en su vida tuvo muchos malos momentos, pero lo que hacía doler su corazón era sentirse tan solo y desvalido. Él no era así, él siempre había llevado las riendas de su vida e incluso la de su hermano, pero en ese preciso momento solo quería llamarlos para que se devolvieran por él y marcharse de ese maldito lugar.

Limpió un par de lágrimas y le preguntó a una señora que pasaba por alguna posada barata para pasar la noche, lamentablemente, las más económicas quedaban en la periferia del pueblo y tenía demasiadas cosas con él. Al final, se armó de valor, buscó un suéter entre sus maletas y trató de acomodar todo para poder llevarlo caminando las dos cuadras que lo separaban del hotel más cercano, rogando que tuvieran alguna habitación económica disponible.

No fue fácil, pero lo consiguió, y lamentó terriblemente no haber pagado el transporte ya que la noche en ese lugar era todavía más costosa, no le alcanzaba con el dinero que tenía, Jongdae se había llevado una buena parte de su paga y lo que le quedaba no era suficiente. Baekhyun se planteó por un momento el quedarse en una banca del parque, no sería la primera vez, pero le preocupaban sus cosas, estando dormido cualquiera podría robarle algo, y pasar toda la noche sin dormir no era algo que pudiera hacer.

La recepcionista pareció comprender su lucha y le indicó lugares más económicos, incluso le colaboró con un par de llamadas, pero no había vacantes en ningún lugar, ya era cerca de medianoche, no había locales abiertos para comer y él se moría de hambre. En este punto, algunos amargos recuerdos vinieron a su cabeza y las lágrimas lo traicionaron. No entendía por qué siempre algo malo le debía suceder a él.

La chica se preocupó más al verlo así, él parecía alguien decente, llevaba ropa normal, económica, pero no parecía indigente ni mucho menos y llevaba varios paquetes, ella se imaginó que había perdido su transporte o algo así. Le ofreció un café caliente y un par de panes que tenía con ella, pero no había mucho que pudiera hacer por él. Entonces pensó que podría dejarlo quedarse ahí en la recepción, ya iba a cerrar y nadie más vendría, si lo despertaba de madrugada para que saliera, nadie la regañaría.

Baekhyun lloró más cuando la chica le dijo su plan, estaba tan agradecido de haber comido algo y de no pasar la noche en la intemperie que ese sillón duro se le hizo la mejor cama del mundo. Realmente no pudo dormir mucho, su cabeza no dejaba de traerle los recuerdos de momentos difíciles que había querido olvidar y su corazón cayó presa de la tristeza.

Sentía como si un mar de aguas oscuras se lo tragara, él siempre trataba de hacer las cosas bien, de ser bueno, de no ofender a nadie, de trabajar duro para salir adelante, pero cuando estaba llegando a la orilla, una nueva ola se alzaba y lo llevaba de vuelta al fondo, siempre era así, siempre un ciclo sin final. La última vez que tuvo que quedarse en la calle era tan joven e ingenuo, no supo prever el peligro y cayó en sus garras.