Capítulo 61

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Cualquiera se enojaría si lo llamaran retrasado.

Afortunadamente, a Rong Rong le gustaba navegar por Internet y también era joven, por lo que probablemente sabía que la frase "¿Tienes retraso mental?" era más como un saludo mutuo entre dos amantes del anime con muerte cerebral.

Esto sólo lo enojó aún más. 

¡Que broma! Representaba al departamento de aplicación de la ley y no necesitaba ningún motivo. Podía simplemente pasar la orden de arresto frente al sospechoso y arrastrarlo directamente, sin mencionar que estaba sosteniendo un arma y apuntándolo.

 Este niño debe tener muchas pelotas para atreverse a hacer una broma en esta situación... Rong Rong miró al niño en la esquina nuevamente. Llevaba una gorra y una camiseta negra con el logo de una banda de indie rock impreso. Tenía los ojos brillantes y sus mejillas se movían como si estuviera mascando chicle. Había una dulzura de limón y menta en el aire.

Quizás fueron los ojos brillantes del joven, pero Rong Rong de repente sintió que algo andaba mal con esta situación. En anteriores operaciones de detención que había llevado a cabo, había llegado a la conclusión de que la tranquilidad de los prisioneros era a menudo proporcional a su ferocidad. En otras palabras, sólo los criminales verdaderamente crueles estarían tranquilos y relajados frente a un grupo de perseguidores armados, como si estuvieran planeando invitarte a tomar una taza de té.

Entonces Rong Rong escuchó que alguien le preguntaba: —¿Quieres un poco de agua?

Siguió el sonido y vio a un joven con una camisa blanca. Tenía el pelo oscuro y hablaba con calma. Quizás planteó la pregunta porque estaba parado junto al dispensador de agua. Antes de que Rong Rong pudiera responder, el hombre ya le había servido un vaso.

Rong Rong sintió que se le ponía la espalda rígida. Movió la mirada y miró al último huésped en la habitación 2801.

Una pistola negra estaba apoyada en la frente del último invitado, por lo que tuvo que dar dos pasos hacia adelante para ver claramente el rostro del hombre.

Era un policía. De hecho, los servicios de inteligencia habían afirmado durante mucho tiempo que entre los invitados al 2801 se encontraba un famoso oficial de policía.

 Naturalmente, ¿De dónde tendría dinero un policía común y corriente para alojarse en un hotel de primer nivel como el Cohen May? Entonces debe ser un policía corrupto. Rong Rong se calmó y de repente se animó. Miró al policía a los ojos.

No podía decir de qué color era, ya que era un aguamarina mezclado con un verde lago. Los ojos estaban tranquilos, como si el mar estuviera absolutamente en calma sin vientos ni olas.

Escuchó al hombre decir: —Baja el arma.

No fue "esperar" ni "reducir la velocidad", sino que dijo "baja el arma".

Fue una orden, no una petición. Aunque la voz era cálida, seguía siendo una orden. No importa cuán crueles fueran los criminales, no se atreverían a decirle cosas tan arrogantes a la policía.

Rong Rong no estaba dispuesto a perder más tiempo. Se llevó la palma de la mano a la oreja y le dio la orden a su subordinado de realizar un arresto directo.

Pero la voz baja y gentil sonó de nuevo. No se dirigía a él, sino al adolescente en la esquina.

—Wang Chao, ¿ya llamaste?

—¿Llamar a quien?— El adolescente obviamente se sorprendió, luego reaccionó rápidamente. —¿A la OIPC?

—Entonces, ¿por qué vendría la OIPC?

PSICOLOGIA CRIMINAL - BLWhere stories live. Discover now