SECRETOS DE SANGRE ©🛡️ |EDICIÓN 2024| #1 *COMPLETADA* 3ER LUGAR FANTASÍA 2016

CAPITULO 90: ENTRE ROSAS Y ESPINAS

🤯

¿¡QUÉÉÉÉÉÉ!?

PERO ¿¡QUÉ MIERDA!?

¡No, Dios mío! ¡Esto tiene que ser una estúpida broma!

¿¡Qué hace esta tipa aquí!? ¿Qué demonios tiene que ver ella en todo esto?

Siento que mis nervios se alteran, mi corazón palpita tan rápido que me da miedo producirme un infarto por esto. Aunque, ¿cómo evitarlo? Si esta tipa es la que me pone así. ¡Qué desfachatez! Estoy que estallo de la ira, pero sé que me tengo que controlar. No puedo armar un escándalo aquí cuando está el hombre que confía en mí: el Decano. Además, no puedo manchar mi prestigio por su presencia. Debo intentar actuar con inteligencia.

—Adelante, señorita —autoriza el decano gentil y ella se pavonea  deslumbrante ante los muchachos con su belleza.

Mis puños se cierran y mis uñas se clavan en la palma de la mano causándome mucho dolor. Reacciono al ver que me estoy haciendo daño. Pero no lo voy a negar, a pesar de todo esta mujer tiene buen cuerpo y un cabello hermoso. Es fina, alta, una barbie, pero me molesta su actitud y el hecho de que esté aquí.

No puedo evitar retorcerme en mi puesto y más, al ver a ella saludando al Decano como si se conocieran de toda la vida. La muy estúpida hace brevemente contacto visual conmigo, su mirada penetrante y aguda me hacen pensar que se burla de mí. ¡Idiota! Daniels ingresa segundos después y todos aprovechan la oportunidad para felicitar al flamante profesor por su cumpleaños de ayer, en vista de que la clase se suspendió y no supe la razón... Tampoco es que me importe.

—¡Bienvenida, querida! Estoy seguro que haremos un excelente equipo de trabajo —murmura, entre tanto el bullicio se hace presente por parte de mis compañeros charlando con Daniels después de cantarle cumpleaños.

¡Ay, por favor! Cuánto amor le tienen a este patán.

El Decano nos da instrucciones, y desde luego, me intereso por saber que hará ella aquí con nosotros. Al parecer conoce más de todos estos temas de lo imaginado. Me deja boquiabierta.

Al terminar, me voy a la cafetería de la facultad para comer algo mientras espero que se haga la hora de mi clase. Tengo mucha pereza de ir al restaurante cercano al campus y el que es mi costumbre asistir, pero seguro Daniels irá a allá a comer con Amanda y yo no tengo ganas de seguir viéndolos.

Tomo asiento en un puesto cercano a la ventana, abro el paquetico de galletas que compre para comenzar a degustar en conjunto con una bebida saborizada de limón, poco tiempo aparecen Daniels y Amanda.

¡Ay, no puede ser!

¡Esto tiene que ser una broma de nuevo y de muy mal gusto, por cierto!

Me hago la loca, la que no los he visto, así que volteo la mirada a otra parte, de hecho, lo hago en dirección a la ventana para ver pasar a la gente y a los autos que circulan dentro del campus.

Creo que este es un sitio ordinario para ellos.

¿Por qué lo que trato de evitar me persigue?

—Ah, Lisa, estás aquí —espeta Amanda llamando mi atención minutos después.

Inevitablemente, volteo a mirarla. Lógico viene acompañada de Daniels, quienes traen algunos refrigerios en sus manos.

—No... allá —contesto sarcástica. Daniels se ríe.

—¡Ay! Pero como andamos susceptibles hoy, ¿no? —replica ella. Yo hago una mueca como si nada me importara. —¿Podemos sentarnos aquí?