"Somos Tú y Yo." (H.P.)

Capítulo 4

La ceremonia había sido muy hermosa, demasiado emotiva. La fiesta estaba siendo toda una delicia, la comida era exquisita y la música increíble, realmente se podía sentir la felicidad de todos los presentes.
Aunque claro… siempre hay que ser precavidos.- ¿Tienes todo? .- hice un sonido de afirmación mientras terminaba de comer mi pedazo de pastel.- ¿Ropa? ¿Zapatos? ¿Comida?
-Pociones, libros, vendas, una tienda.- suspiré.- Lo tengo todo, Hermione.- mostré mi bolso
-Lo siento.- la abracé.
-¿Por qué no bailamos?.- la miré divertida
Ella rio y me ofreció su mano.- Con gusto bailaré con usted, buena señorita.- reí a carcajadas y tomé su mano para unirnos a la pista de baile.
Nos unimos a la hermosa pareja y demás invitados, girábamos y girábamos mientras los demás reían y aplaudían al son de la música.- Gira.- la hice girar… hasta que chocó con Ron
-Ou
-Como lo siento.- las mejillas de Hermione se tornaron rosas al igual que las de Ron
-Descuida.- ambos se miraron con sonrisas nerviosas durante mucho tiempo
-¿Empezarán a bailar o tendré que empujarlos a la pista?.- ambos comenzaron a balbucear nerviosos, tomé sus manos e hice que las entrelazaran.- Vamos.- los empujé a la pista y aunque al principio parecían nerviosos, terminaron por bailar juntos.
Era bonito verlos feliz, a todos de hecho… bueno, casi todos. Harry estaba sentado a unas cuantas mesas hablando con Elphias Doge y otra vieja bruja a la que no podía verle el rostro, Harry parecía algo decepcionado y confundido, iba a acercarme hasta que escuché algo acercándose… miré hacía arriba y noté una luz azul viniendo a nosotros con gran velocidad.
Esta misma atravesó la carpa asustando a los presentes.- El Ministerio ha caído.- se podían ver personas corriendo despavoridas de algo.- El ministro de magia está muerto… Ya vienen… Ya vienen… Ya vienen.- la luz desapareció y todos, por supuesto… comenzaron a entrar en pánico y a irse.
Fue cuestión de segundos para que mortífagos aparecieran atacando… matando a los invitados.- Remus.- yo no…- ¡Remus!.- él me detuvo
- ¡Huye, ahora!
-¡No!.- grité
-¡Harry! ¡Llévatela!.- Harry me jaló del brazo, en un instante veía la mirada de miedo de mi tío y en otro… esquivábamos un autobús.
Nuestra respiración estaba agitada.- ¿Qué demonios?.- tallé mi rostro conmocionada
-Síganme.- Hermione comenzó a caminar
Harry tomó mi mano con firmeza y los tres seguimos a Hermione. Pasábamos entre las personas de las ciudad, estábamos nerviosos y algo asustados.- ¿Recorrido turístico? Sale en 15 minutos
Habían demasiadas personas.- ¿Dónde estamos?.- preguntó Ron
-En Shaftesbury.- respondió Hermione.- Venía aquí al teatro con mis padres. No sé por qué lo recordé, solo se me ocurrió. Síganme.- nos guio hasta un callejón solitario.- Tenemos que cambiarnos.- llegamos hasta el final.- ______...- tomé la bolsa de Hermione para que ella pudiera meter el brazo y sacar la ropa de los chicos
-¿Cómo rayos…?- Ron sí que estaba impresionado
-Un hechizo indetectable de extensión.- comenzó a darles su ropa
-Eres impresionante.- sonreí leve, pero aún me encontraba algo aturdida por lo sucedido
-Siempre el tono de sorpresa.- Hermione dijo divertida, hasta que movió su bolso y sus libros se derrumbaron.- Ou… fueron los libros
-Por lo menos no rompieron nada.- ladeé la cabeza. Miré a los chicos.- Cámbiense ahí.- señalé el basurero detrás de nosotros.

...

Al terminar de cambiarnos, Hermione nos guio hasta una cafetería, no estaba tan alejada de donde estábamos.- ¿Y todas las personas de la boda?
-¿Debemos volver?.- pregunté insegura.
-Los están buscando, amigos.- Ron nos miró.- Los pondremos en peligro si volvemos.
-Ron tiene razón.- dijo Hermione
La mesera se nos acercó.- ¿Café?
-Un capuchino, por favor.- respondió Hermione
-¿Tú?.- señaló a Ron
-Lo que pidió ella.- respondió
-Igual.- dijo Harry
-Un chocolate, por favor.- respondí, la mesera asintió y se fue dejándonos solos otra vez
-¿A dónde vamos ahora?.- preguntó Ron.- ¿Al Caldero Chorreante?
-Es peligroso.- dijo Hermione.- Si Voldemort se adueñó del Ministerio, no hay lugar seguro. Todos los invitados a la boda tendrán que esconderse.
-Mi mochila con todas mis cosas la dejé en la Madriguera.- Hermione y yo nos dimos una mirada, negamos y enseñamos nuestras bolsas.- ¿Bromean?
Dos sujetos entraron a la cafetería.- Empacamos todo lo esencial hace días. Por si acaso.- dije
-Por cierto…- ay no es cierto.- Estos pantalones no me gustan
-¡Agáchense!.- eran mortífagos
-¡Desmaius!.- Harry le dio a uno
-¡Expulso!.- pero aún quedaba uno de ellos, nos cubrimos por un momento al igual que él, cuando iba a atacar… Hermione y Ron lanzaron hechizos haciendo que se cubriera de nuevo
-¡Petrificus Totalus!.- mi hechizo le dio y él cayó al suelo
La mesera salió de pronto y miró el lugar asustada.- Vete.- Hermione dijo firme.- Que te vayas. – no lo dudó un segundo más y salió por la puerta trasera
-Bajen las persianas y apaguen las luces.- ordenó Harry
Hermione acató la primera orden y Ron la segunda con su desiluminador. Nos acercamos a los cuerpos.- Este se llama Rowle.- le quité su varita
-Estaba en la torre de Astronomía cuando Snape mató a Dumbledore.- dijo Harry
-Este es Dolohov. Lo vi en los carteles de “Se busca”.- Ron miró al siguiente.- ¿Y qué haremos contigo?.- nos acercamos.- Nos matarías si estuvieras en nuestro lugar
-Si los matamos, nos delataremos.- dijo Harry
-Ron.- Hermione lo llamó
-¿Si él hubiera matado a Moody? ¿Qué pensarías?.- parecía muy enojado
-Es mejor borrarles la memoria.- dije
-Ustedes mandan.- Ron se alejó del cuerpo.- Hermione. Eres la mejor en hechizos
Hermione se acercó y lo apuntó con su varita.- Obliviate
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☹️

-Ela 🔮