Hasta Que Lo Infinito Se Acabe.

Epílogo.

Ayudamos al tiempo para que todo siguiera en su lugar. Nos esforzamos en ser mejor a lo que fuimos, pero no cambiamos nuestra esencia.

Él, un ser oscuro tieso por exceso bótox y yo, una maleduca cuya cara se le trabó y por eso sonríe tanto.

Mi vida sigue siendo un vaivén de momentos; felices, estresantes, odiosos, deprimentes, alegres... Momentos llenos de colores. Y aunque sé que en esta vida nunca se deja de aprender, les diré lo que yo sé:

Primero, pasar por aquellos horribles colores es totalmente necesario para terminar siendo los mejores. Segundo, perderse es fundamental para encontrar el camino correcto. Tercero, el amor no sigue reglas, ni estándares, ni un patrón; yo creí que tendría un amor color de rosas y me encontré con uno que me hace ser multicolor. Cuarto, que lo aprendí de él, lo que funciona junto, jamás debe separarse, por más que nosotros nos alejemos, todo termina volviendo. Y por último, esforzarse es el pilar fundamental para lograr lo que soñamos y lo que soñamos no siempre lo descubrimos apenas nacemos.

Descubrirán muchas cosas mientras dan cada paso en su vida. Por eso, sientan, disfruten y vivan con toda la intensidad del mundo.

FIN.