『 ¡Señor, por favor, tenga polluelos conmigo! 』

Capítulo 14.

Qi Fei bai y Guan Lin Yu se encontraban en el asiento trasero, como si hubieran creado un pequeño mundo solo para ellos.

Entre ambos, se sentía una corriente de aire lenta y llena de romanticismo.

Guan Lin Yu, con una mirada de asombro en los ojos de Guan Yao Yao, compartió la pantalla de su dispositivo con Qi Fei bai. Sus dedos largos y huesudos señalaban las acusaciones y los insultos que inundaban las redes sociales.

—¿Ves? —dijo Guan Lin Yu, con un tono de voz ligeramente cauteloso mientras miraba a Qi Fei bai—. Todo esto es por el mensaje que tu prometido publicó. La gente está aquí para insultarte.

Los comentarios de los internautas eran bastante desagradables, y Guan Lin Yu solo le mostró a Qi Fei bai los menos ofensivos. Si Qi Fei bai los hubiera visto solo, se habría enfadado y entristecido.

Sin embargo, en ese momento, Qi Fei bai podía sentir la protección de Guan Lin Yu, lo que hizo que su ira se disipara al instante.

—¿Qué debo hacer? ¡Voy a enfrentarme a ellos ahora mismo! —exclamó Qi Fei bai, mirando fijamente a Guan Lin Yu. Su voz sonaba incluso un poco amenazante, como si estuviera lleno de energía.

Guan Yao Yao se tapó la boca con la mano, temiendo que pudiera dejar escapar un sonido. Sus ojos brillaban mientras observaba a Qi Fei bai.

Ella por fin entendía por qué a su hermano le gustaba tanto ese omega.

La sinceridad y la ternura eran las armas más poderosas.

Guan Lin Yu también esbozó una sonrisa:

—No hace falta. Son muchos, no puedes discutir con ellos, no ganarás.

—¿Y qué hago entonces? —preguntó Qi Fei bai.

Guan Lin Yu miró a Qi Fei bai con más seriedad que antes:

—Tienes que entender que eres un omega. No solo tu condición física es inferior a la de los betas y los alphas, sino que la sociedad y tu familia te impondrán ciertas responsabilidades en cuanto al matrimonio y la reproducción...

En ese momento, Guan Lin Yu se detuvo.

El deseo de Qi Fei bai por tener hijos no parecía ser algo que le hubiesen impuesto.

—Así que, cuando te ataquen, lo primero que debes hacer es mantener una actitud correcta. Si has cometido un error, no lo niegues, pero al mismo tiempo, defiéndete con firmeza.

En ese momento, las redes sociales estaban en llamas.

"¡Un omega como Qi Fei bai debería ser enviado a la raza insecto para un matrimonio político!"

"¡Él no se merece a Shi Ke!"

"¡¿Cómo puede haber un omega tan libertino y sin límites?!"

"¡El señor Guan tiene buen ojo, seguro que no le gusta ese tipo de omega!"

"¡Por supuesto! ¡El señor Guan no puede estar involucrado con un omega tan despreciable!"

"¡No se atreve a responder porque seguro se siente culpable!"

En ese preciso instante, la cuenta de Qi Fei bai respondió.

Qi Fei bai: Lamento haber causado problemas a Shi Ke. Pensé que nuestra relación ya no tenía sentido, por ello decidí buscar a alguien más. Tal vez me equivoqué al pensar que gustaba de mi primo, y por eso elegí a otra persona. Ya he solicitado la anulación del compromiso, espero que pueda aceptarlo.

—¡Eres tan bueno, hermano Linyu! —exclamó Qi Feibai, levantando el pulgar hacia Guan Linyu, el editor principal—. ¡Así ya no me insultarán!

Aunque no sabía programar, Qi Feibai sí que podía apreciar el poder de las palabras.