El fantasma del animal los contemplaba con sus grandes, brillantes e inocentes hojillos y el diablillo no aguantó más y explotó de la risa.
Diablillo: jajajaja, ¿esa exbola de pelo es esa alma tan malvada y peligrosa?
Shinigami: sí. Ríete todo lo que quieras. Pero te aseguro de que estoy diciendo la verdad.
Diablillo: [sonreír de forma orgullosa] yo lo cocecharía en un parpadeo.
Shinigami: oh. ¿Eso crees? Como se nota que no eres un shinigami. No tienes ni idea.
Diablillo: ¡No necesito ser un shinigami para... Aaaaay!
Kazuki le había pellizcado la mejilla y no se la soltó.
Kazuki: haber... Vamos a calmarnos un poco. Shinigami...
Shinigami: oh. Llámame Shin. Acabo de recordar que no me presenté formalmente la otra vez.
Diablillo: yuou meu lluamu Kukou...
Shin: ¿Qué?... Lo siento... Pero no entiendo al niño si no le sueltas la mejilla.
Kazuki: oh, no ha dicho nada importante. No le prestes atención.
Diablillo: ¡mualdiutou! [Retorcerse]
Kazuki: explicame eso de que es peligroso.
Shin: [suspirar] haber... Cuando un ser vivo muere, depende de cómo haya vivido su vida para transformarse en un alma pura o un alma corrompida.
Kazuki: [asentir] Esa parte también la conocemos nosotros los ángeles.
Shin: bien. Pues... Ahí tienes un caso.
Kazuki: [mirar al chihuahua] ¿Estás diciendo que ese bicho es un alma corrompida?
Shin: su dueño lo abandonó en la carretera y murió atropellado. Se niega a ser cosechado sin antes vengarse de su ex amo.
Kazuki: no sabía que eso también se aplicaba a los animales. Pensé que la corrupción era sólo en los humanos.
Shin: ya ves... Nuestro turno de cosecha es muy variado y trabajoso.
Una nueva rafaga de aire sacudió de nuevo a Shin, y lo hizo ondearse como a una bandera en la antena.
Shin: ¡Waaaa! Odio los días ventosos...
Kazuki: [pensativo] si es eso cierto... Quiere decir que cuanto más tiempo esté aquí, más poderoso y peligroso se volverá.
Shin: efectivamente... Pero con este viento me es demasiado difícil...
Diablillo: ¡¿Meu sueultuas yua lua mejuilla?!
Kazuki: Uy. [Soltarle la mejilla]
Diablillo: [frotarse la mejilla inflada y roja] ¡Me duele, bruto...! [Tener los ojos brillosos aguantando las lágrimas]
Kazuki: te lo merecías. [Frotarle suavemente la cabeza a modo de consuelo]
Diblillo: he dicho que yo me llamo Kuku. Y ¿Cómo es posible que te enfrentes a almas macabras y corrompidas, pero te vence un día ventoso?
Shin: [resoplar molesto] todos tenemos que tener alguna debilidad, ¿no?
Diablillo: sí... Pero el viento... Pf... [Taparse la boca para no volver a explotar de la risa]
Kazuki: [hacer una pinza con los dedos] ¿Quieres volver a quedarte mudo?
Diablillo: [fruncir el ceño] ¡No! Déjame en paz...
Shin: para ser ángel y diablillo os lleváis muy bien.
Ambos: [mirar a shin, furiosos] ¡Ni en sueños!
Chiuhahua: ¡Wuau!
Los 3 miraron en su dirección y el chihuahua ya se alejaba flotando a toda velocidad por las calles.
Shin: ¡No hay que perderle el rastro! ¡A por él!
Kazuki ayudó a Shin a soltarse de la antena sin salir volando. Y en un parpadeo, tenía al diablillo cogido en el brazo izquierdo y a Shin con su brazo derecho entrelazado al suyo.
Kazuki: ambos pesáis mucho... No podremos seguirle la pista tan rápido.
Shin: habrá que hacerlo. No sabemos a cuanta gente podrá perjudicar mientras ande suelto.
Diablillo: ¡yo puedo volar solo! ¡Sueltame!
Kazuki: [fulminarlo con la mirada] ¿Juras que no te escaquearas?
Diablillo: [negar con la cabeza] digamos que esto ya me está resultando interesante.
Kazuki: de acuerdo... [Soltarlo]
Diablillo: ¡Ja! ¡pardillo! [Hacer ademán de huir]
Kazuki: ¡Eh! [Atraparlo]
Diablillo: jijiji, era broma, pardillo.
Kazuki: ¡¿A qué viene esa estupidez?!
Diablillo: para que hicieras eso.
Kazuki: [fruncir el ceño] ¿Él qué?... [Mirarse el brazo derecho] ¡Oh, mierda! ¡Shiiin!
Shin: [volando muy lejos de ellos] ¡que me voooooy...!
Diablillo: jijijiji, pringao...
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Siempre contigo.
Teen FictionAzuka es una chica de 19 años con muchísima mala suerte desde pequeña. Es tan patosa, despistada y le surgen tantos peligros, que ni ella misma sabe cómo ha conseguido burlar a la muerte tantas veces, ni tantos años. ¿En ese caso, no sería al contra...