Mommy

Capítulo 5

hasta hoy fue la vez en que hice un sacrificio tan grande en levantarme de la cama y dejar a esa pequeña ternura sola, tome mi cabello en una coleta, cepille mis dientes y baje a la cocina. rachell ya tenía listo el desayuno, y se lo agradecía por qué mis tripas sonaban horrible, me senté en la pequeña barrita que había ahí, la sala del comedor era grandísima y me sentía sola al comer ahí. mientras metía una gran porción de comida a mi boca pude divisar a cassie bajando por las escaleras tallandose los ojos, llegó hacía mí y sonrió, era inevitable no responderle. rachell le sirvió un plato igual que el mío y se sento enfrente de mi.
—¿puedo desayunar aquí?

asenti, vaya que me hacía falta. pude notar su manera de comer lenta y una que otra vez la cachaba mirándome.

—cassie, ¿quieres estudiar?

—sí, termine hasta la preparatoria.

—bueno, elige cuál quieres, pequeña.

—¿enserio?

—sólo que no sea como la de tu hermano, tiempo completo.

—no, no, no. siempre he soñado con ir a gules.

—ahorita irán a inscribirte, no creó que necesites hacer examen.

—muchas gracias, mami.

un pum pum pum se podía oír en mi pecho, cuándo esa palabra salió de su boca, quería besarla y grabarla diciendo mami y ponerla de música de fondo en mi elevador, en mi celular y en mi alarma.

—¿compraste ropa?

—sí, quería poca. pero rachell dijo que tenían que ser más de cincuenta prendas máximo y creó que me excedi, lo siento mucho.

—podrías comprar 100 si quieres, no hay problema. ¿quieres ir hoy a mi trabajo?

ella asintió, tomando el último tragó de leche para después subir las escaleras. hice lo mismo

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baje con mis zapatillas ruidosas ¡ugh como las odiaba! pero tenía que vestir formalmente, según reglas de ahí. baje las escaleras maldiciendo cada vez que me lastimaban, sin darme cuenta que la pequeña chica se encontraba abajo mirándome y riendo de mí. oh vamos, su risa era contagiosa y al igual que ella reí. mire su vestimenta, era una blusa algo descubierta de los hombros una falda rosa y unas medias que llegaban a sus rodillas, podría derretirme ahí mismo. caminé hacia ella y le extendi la mano, ella tomo la mía y pude darme cuenta que su mano era pequeñita a un lado de la mía, encajaban perfectamente, caminamos hacía la camioneta una que otra vez veía las miradas curiosas de los trabajadores, que según ellos disimulaban. el chofer me dio los buenos días, antes de darlos yo, cassie respondió con una voz algo chillona, aunque no me molesto en lo absoluto. al llegar a la empresa, y abrir la puerta una orda de trabajadores me saltaron encima preguntándome cosas, yo solo caminé ignorandolos.
—¡coffie! ¡coffie!

—perdón, perdón, no me dejan entrar, agh..auch, quitense.

—coffie, organiza las citas con ellos, por favor. pidanle a ella, no a mí.

pude ver a cassie algo alejada fui hacía ella y la tome de la mano, ahora eran más miradas curiosas. hasta que por fin llegue a mi oficina, abrí la puerta, dándole una señal a cassie para que entrara, cerré la puerta tras de mí.
—¿quieres que te ayude en algo, mommy?

—no, pequeña. todavía no.

—bien, ¿puedo sentarme?

—si, hazlo, princesa.

unas que otras personas venían  a platicar conmigo y cassie solo se encontraba centrada en su celular, coffie entro alterada y sudada.
—holly, megan esta aquí.