a fondo | franco colapinto

025 | stillness

veinte de octubre

agustina's pov

El Circuito de las Américas estaba repleto. El calor del asfalto parecía subir hasta las gradas, donde los fanáticos no dejaban de vitorear. Había una energía en el aire, como si todos supieran que la carrera de ese día quedaría grabada en la memoria de muchos. Desde la sala de prensa, con mi grabadora y mi libreta en mano, observaba cómo se alineaban los autos.

Mientras los semáforos se apagaban y los motores rugían, el espectáculo comenzó. Franco no tardó en mostrar su destreza, la voz del comentarista resaltaba cada una de sus maniobras, pero yo no necesitaba esas palabras para saber que estaba haciendo una carrera extraordinaria.

A medida que avanzaban las vueltas, mi corazón latía más rápido con cada giro, cada defensa impecable, cada adelantamiento ajustado. Franco no solo estaba corriendo; estaba demostrando que pertenecía a ese lugar. A pesar de estar entre los mejores del mundo, no se achicaba.

Al final, cuando cruzó la línea de meta en decimo lugar, levanté mi vista del monitor y me encontré sonriendo sin querer. Era imposible no admirar el talento que había desplegado en la pista. Mientras el público aplaudía de pie, yo me preparaba para las entrevistas post carrera. Sabía que esta charla con Franco no iba a ser como cualquier otra.

Cuando lo vi acercarse a la zona de entrevistas, todavía llevaba puesto el mono de piloto. Su casco, en la mano derecha, reflejaba las luces de las cámaras, y aunque se lo veía agotado, su expresión estaba llena de satisfacción. Había sudado cada segundo de esa carrera, y se notaba.

-Franco, primero que nada, felicitaciones por ese décimo lugar. Fue una carrera increíble. ¿Cómo te sentís? -pregunté con una sonrisa profesional, pero no pude evitar que mi tono reflejara cierta admiración.

Él se pasó una mano por el cabello despeinado y me miró con esa sonrisa suya, mitad cansancio, mitad orgullo.

-Gracias, Agus. Me siento... muy bien. Era una carrera complicada, pero hoy todo salió como queríamos. Estoy feliz con el resultado.

-Se te vio sólido desde el inicio. Ese adelantamiento en la primera curva fue impresionante. ¿Lo tenías planeado o fue más instintivo? -continué, intentando mantener el foco en lo técnico.

Franco soltó una pequeña risa, como si mi pregunta le trajera el recuerdo fresco de ese momento.

-Un poco de las dos cosas. Sabía que tenía que aprovechar cualquier espacio, pero también hay que tener instinto para decidir en el momento. Por suerte salió bien -respondió, su mirada fija en la mía.

No estaba acostumbrada a que un piloto me mirara así durante una entrevista. Había algo en su tono, en cómo bajaba ligeramente la voz, que parecía querer decir más de lo que estaba diciendo. Intenté concentrarme y seguir con las preguntas.

-¿Y qué me decís del Safety Car? Parecía que con los neumáticos nuevos tenías chances de pelear por el podio. ¿Cómo lo viste desde el auto? -pregunté.

-Sí, fue clave. En ese momento pensé que podía intentarlo, pero también sabía que no tenía sentido arriesgar demasiado. Un décimo lugar es un gran resultado para el equipo y para mí. Aunque... -hizo una pausa y levantó ligeramente las cejas, como si estuviera a punto de agregar algo interesante-. Para serte sincero, tenía algo extra que me motivó hoy.

Lo miré, confusa. la sonrisa que apenas se dibujaba en sus labios... algo en su postura parecía buscar mi reacción.

-¿Algo extra? ¿Qué tipo de motivación? -pregunté, intentando sonar casual, aunque sabía que algo estaba pasando.