Capítulo 1

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Mi alarma comenzó a sonar a las 6:00 a.m. Las clases empezaban hasta las 8 de la mañana. Con algo de esfuerzo, me levanté de mi cómoda cama me estiré mi cuerpo hasta donde este me lo permitía. Tome una toalla y me dirigí al baño, el agua fría me ayudara a despertar mejor. Luego de pasar aproximadamente unos 15 minuto bajo la regadera, regrese a mi cuarto para así terminar de arreglarme. No soy una persona tan complicada para vestirse, así que opté por elegir unos jeans claros, con una blusa blanca un poco suelta, acompañado de unos converse negros. Me hice mi típica cola de caballo e alcance mi lentes que reposaban encima del tocador. Ya estando lista, baje a desayunar antes de que se hiciera tarde. Al llegar al comedor, mi madre ya se encontraba en este junto con el desayuno servido.

—Hola mamá — Dije mientras besaba su mejilla.

—Hola hija. Mira, siéntate y come antes de que se enfríe — Manifiesta antes de darle un mordisco a su tostada.

—De acuerdo.

Sin más preámbulo hice lo que me pidió. Al cabo de terminar de comer, agarre mis cosas, me despedí de mi madre, y salí rumbo al colegio, o como yo lo llamo: mi tortura. ¡Ah! claro, olvide mencionarlo, en el colegio soy a la que llaman "la nerd", y por este simple hecho, solo cuento con dos mejores amigas, Verónica y María Fernanda, ya que, son las únicas en todo el lugar que se juntarían conmigo, por el simple hecho de que ellas, ven más allá de mi, y no me juzgan por mis virtudes o defectos, solamente miran... Mi esencia, lo que soy en verdad, y no por lo que aparento. Claro que, no todos los demás estudiantes cuentan con esa mentalidad. La mayoría solamente prefieren calificarte a como te ves, sin molestarse en conocerte. Aunque, la verdad no me importa, la gran parte de la comunidad estudiantil son indiferentes conmigo, y yo lo soy con ellos, el verdadero problema aquí es; Alicia Lewis. Ella, solo es una presumido que se cree mejor que los demás, solo porque es la líder de las porristas, y por eso, piensa que pueden pasar por encima de los otros, sin ninguna consideración, sobre todo de mi, causando así que, cada vez que tiene la oportunidad intenta hacerme la vida de cuadritos. Por suerte cuento con muy buenas amigas que, siempre intentan estar ahí para mi. Claro que, Alicia es muy astuta, por lo que casi la mayoría de las veces me molesta más que nada cuando me encuentro sola. Ah... no siempre es fácil defenderse tratándose de la oxigenada y de su séquito de huecas.

Como sea, luego de 20 minutos caminado por fin llegue al colegio. Sin más, me dirigí a mi casillero, no sin antes llevarme por delante, aquellos comentarios de "nerd" o "tonta", seguido de algunas burlas. Simplemente seguí por mi camino. Llegue a mi locker y saque los libros de mi primera clase del día; Castellano.

Estaba a punto de cerrar el casillero, pero alguien tapo mi vista por encima de los lentes.

— ¿Quién soy?.

— ¿Jumm?, a ver, acaso... ¿serás Pie Grande? — Interrogue en modo de burla. Ya me imaginaba quién era.

— Ja ja, muy graciosa — Dice antes de destaparme los ojos.

— Hola Vero, ¿y Mafe? ¿dónde está? — Pregunte mientras la buscaba con la mirada.

—No lo se, apenas acabo de llegar — Articulo a la vez que se encogía de hombros.

—Hola hola — Y hablando del rey de Roma.

— Por fin llegas.

— Bueno, ya que estamos todas, ¿qué clase les toca? — Pregunte mientras, ahora sí, cerraba la taquilla.

— A mi me toca Artes — Expreso Verónica mientras enseñaba sus materiales.

— Me toca Castellano.

— ¡Genial!, a mi igual. Vamos, ya casi suena la campana.

— Esta bien. Nos vemos en el receso Vero.

—Hasta luego — Manifestó Vero antes de partir por el camino contrario.

Mafe y yo, partimos hacía el segundo piso. Llegamos al aula justo unos segundos antes de que sonara la campana. El salón ya se encontraba en su totalidad lleno, por suerte todavía quedaba dos pupitres vacíos uno al lado del otro, justo lo que necesitábamos. Ya los pocos asientos que quedaban, estaban al lado de otras personas que no conocía. Menos mal podré estar al lado de mi mejor amiga.

Luego de ocupar los puestos, el profesor se presentó en el aula.

— Buenos días clase.

— Buenos días — respondimos todos al unísono.

— Bueno, como primera labor del día, les asignare un trabajo que costará el 40% de su calificación final. Lo realizaran en... — Tocan a la puerta.

El profesor se dirigió a la puerta. Ya me puedo imaginar quién podría ser.

— Ah, señor Espinosa, ¿cuál es la excusa esta vez? — Interrogó él, ya suponiendo cuál sería la típica respuesta.

— Como ya sabe me quede dormido — responde todo despreocupado a la vez que se apoyaba en el marco de la puerta.

— Deberías tratar de inventar una nueva excusa — El chico de la puerta solo se encoge de hombros sin restarle importancia — Ah... Pase antes de que me arrepienta.

— Vaya, que generoso — Expresa con sarcasmo. Busca un puesto vacío y se encamina a él sin más.

Maicol Espinosa, el chico con más fama de mujeriego. No le importa nada, y llega a clases a la hora que le da la gana. No es más que un dolor de cabeza en mi opinión, además de que no tiene consideración con las chicas con la cual se revuelca. Me da asco.

—Bueno, antes de esta pequeña interrupción, les iba a mencionar que, el trabajo será en parejas — Antes de que terminara de hablar, todos lo presentes comenzaron a murmurar a lo alto. Lo más probable es que ya estén pensando con quien harán el trabajo — Pero no se emocionen tanto. Las parejas las asignare yo — No todos estaban conformes con ello. Algunos hasta empezaron a quejarse.

— Ya silencio. Dictare los nombres:

Fernando con Paula.

Rodrigo con Elena.

Andrea con Lina.

Laura con María Fernanda — y ahí va mi pareja. Qué mala suerte.

Me limité a observar a mi amiga, ella también me miro. Al parecer también quería que nos tocará juntas.

El maestro siguió dictando varios nombres más, hasta que por fin mencionó el mio.

— y por último (tn) con Maicol. Eso es todo.

Espera... ¿yo con quién?. Oh no, esto es malo, es muy malo. No puedo hacerme con Maicol mujeriego Espinosa. Volví a mirar a Mafe, ella ya me observaba con preocupación en sus ojos.

— Te deseo suerte — Dice mientras su mano reposa sobre mi hombro.

¡Oh!, créeme amiga, eso es lo que necesito ahora.



Foto de multimedia

Sacado de la página: https://www.okchicas.com/belleza/trucos-maquillaje-chicas-lentes/

Autor: Valeria Calderón

La Nerd más Bonita (Pausada)Where stories live. Discover now