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°Nota Autora°

Saludos:
Lamento haberme tardado es debido al inició de clases en mi país no he tenido mucho tiempo pero les prometo publicar lo más posible para ustedes mis lectores. Los amo y esperó disfruten el capítulo. Ah, se me olvidaba el primer día de clases me entero que tengo un profesor joven y apuesto de 27 años. Es hermoso pero le tengo mis respetos.

He comenzado una novela titulada "Amor y condones" esperó les gustes.

A continuación capítulo número 7:

Tomé el iPhone que estaba colocado en aquella mesa de dormir. Había comenzando llamar a Arianne le pregunté si quería pasar el día conmigo ella aceptó. Pero me dijo que tenía un pequeño problema y que me lo iba a decir.

Me quedaba una hora para ir a buscarla exactamente a eso de las 10:00. Decidí ir al baño a tomarme una ducha.

Comencé a quitar toda ropa que me había puesto por aquella mujer cuyo nombre no quiero mencionar. Di un paso en aquella fría loza, mi mente quería olvidar todo por un momento. Aveces quisiera tener el poder de borrar cada problema. Pero lamentable así es la vida hay que aprender de cada uno de ellos.

Después de este analítico momento me fui a vestir para luego ir a verla.

Estaba ya en la casa esperando por ella. Cuando veo que abren la puerta y la veo con cara de decepción. Me bajo del auto y abro la puerta del auto.

-No estaremos solos mi hermana viene por ahí.- dijo ella molesta.

-¿Es enserio, porque?- respondí

-Mi madre dijo que si quería ir contigo ella debía venir también por hoy, por que no la quiere en casa. Quiera hacer una de sus porquerías en la casa.- dijo ella

Esperamos a la hermana de ella por más de 5 minutos cuando formalmente salió.

Mierda que me maten pecador por que la hermana esta igual de buena que ella sólo que es un poco más flaca. Es una pelirroja con su tono de piel bien blanco llevaba un traje negro y un lápiz labiar rojo que hacían resaltar sus grandes y carnosos labios. Ella se subió al auto una vez le abrí la puerta, el olor de su cabello y de su perfume abrazaron mis fosas nasales. Finalmente cerré la puerta estando ya ambas en el auto nos dirigimos a un restaurante.

Fuimos a comer en el olive garden que era el restaurante cerca. Ya nos encontrábamos dentro. Tomamos asiento en un lugar con poca luz. Se acercó un mesero y tomó nuestro pedido habiendo terminado esto recibí un texto.

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DE: Arianne

Hubiera preferido que estuviéramos solos para hablar sobre aquello. Y que dejemos todo claro.
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Me molesto un poco pero es la verdad tenemos que dejar esto, arriesgara la universidad y nuestra reputación.

La hermana de ella de sentó a mi lado. Y comenzó primero hablar de las mierda de chicas pero luego me hizo preguntas a mi.

-Asi que eres profesor y de matemáticas. Creó que necesitaría unas tutorías.- terminando de decir eso ella colocó su mano derecha en mi muslo. Sentía un escalofrío, mi cuerpo se tenso a su tacto y comenzó un calentón en todo mi cuerpo que deseaba más pero recordé que estaba en un restaurante y estaba Arianne la chica que me volvía loco.

-Asi que eres la hermana gemela fraterna de Arianne. Es chevere eso, yo tenía un hermano gemelo pero lamentablemente falleció. Su cuerpo nunca fue encontrado de aquel accidente automovilístico. Lo extraño aveces sus manías, sus porquerías, y nuestros estúpidos baile homosexual con la canción de Darwin- Dessert.-luego de las palabras sonreí.

-Que hermosa sonrisa usted tiene de verdad.- dijo su hermana y yo sólo la miraba a ella quien con decepción total no me miraba y sólo estaba mirando la servilleta.

-Aquí esta vuestro pedido.- dijo el mesero haciéndome sobresaltar.

-Si me permiten iré al baño.- dije levantándome seguido de ella diciendo que iría de igual forma dejando a su hermana en la mesa con nuestra comida.

-Sabes que aquí sólo ahí un baño para hombres y mujeres. - le dije

-No me importa con tal de hablarte y dejarte algo en claro.- dijo ella.

Entramos al baño mirándonos a los ojos ella con sus lágrimas a punto de salir me dijo- ya no podemos estar juntos tu debes tomar tu lugar y yo el mio. Eres solamente mi profesor y yo tu alumna no vuelvas a dirigirme la palabra o incluso a tocarme lo hago por el bien de los dos.- me dolió oír salir aquellas y cada una de sus palabras.

-¿Eso quieres?- dije

-Si.- dijo ella intentando mantenerse firme.

-Sólo permiteme darte un último beso.- ella asintió nos dimos un beso suave pero apasionado.

La tome de la mejilla se la acaricie la mire con ternura y salí de aquel baño. Luego terminamos nuestra comida la lleve a tiendas de lencerías entre otras las lleve a sus casas para luego irme a la mía.

Me sentía devastado no quería seguir con nada así que decidí acostarme un rato presentía que el día siguiente sería un día largo.

Atraido a una gorditaKde žijí příběhy. Začni objevovat